El medio El Colombiano publicó este domingo imágenes de una libreta que pertenecería a Francisco Correa Galeano, el testigo clave en la investigación por el magnicidio del fiscal paraguayo Marcelo Pecci. En la agenda que fue hallada en una celda de la cárcel La Picota, en Bogotá, aparecen mencionados el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset y su socio Miguel Insfrán Galeano, alias Tío Rico.
También hay referencias a dos organizaciones criminales tradicionales de Medellín (“La Oficina” y “La Terraza”) y a posibles lugares de encuentro en Cartagena y Santa Marta, ciudades en las que se planificó el asesinato de Pecci en mayo de 2022. El artículo del medio colombiano lamenta que esta información que encontraron los funcionarios del centro penitenciario no podrá ser contrastada con el testimonio de Correa Galeano, asesinado en la madrugada del 3 de enero.
Para la familia de Pecci, sin embargo, el material podría servir para darle un nuevo impulso a la investigación judicial. El abogado colombiano Fernando Bernate, representante de las víctimas, dijo que pedirá pruebas de grafología para determinar si las anotaciones son de puño y letra del testigo asesinado. “Si se confirma la veracidad, esa libreta sería un arsenal de información”, declaró Bernate este lunes 13 al medio paraguayo ABC. La familia de Pecci confía en que las pericias también serán útiles para establecer en qué fecha se realizaron esos apuntes.
El exmilitar colombiano Correa Galeano estaba detenido desde junio de 2022 y era una pieza clave para esclarecer el asesinato de Pecci. En una primera instancia lo imputaron por homicidio, fabricación, tráfico y porte de armas, pero la buena disposición que mostró para colaborar con la investigación judicial mejoró su situación penal.
De hecho, estaba prevista una audiencia para el 19 de enero en la que iba a ser condenado exclusivamente por porte ilegal de armas. Su testimonio permitió identificar a varias personas directamente involucradas en la organización y la financiación del asesinato de Pecci, entre ellas Margareth Chacón Zúñiga, que enfrenta una pena de 35 años de prisión.
Si bien hay que esperar el resultado de las pericias grafológicas para determinar si los apuntes son de su autoría, Correa Galeano ya había responsabilizado a la organización de Marset y Tío Rico por el crimen del fiscal paraguayo. “El homicidio de Pecci viene porque detuvo a Insfrán Galeano, Tío Rico, y por molestias del presidente del Paraguay, Horacio Cartes”, declaró Correa Galeano en una audiencia judicial de octubre de 2023. 15 meses después de estos señalamientos, apareció muerto en la cárcel La Picota; las autoridades penitenciarias de Colombia ya identificaron al preso que lo asesinó y ahora intentan saber cuáles fueron las razones.
El abogado Bernate descartó que a Correa Galeano lo hayan matado “en medio de una pelea o de una riña”. “Esto tiene que ver con la información que estaba entregando”, denunció Bernate. Agregó que Correa Galeano tenía más datos para aportar ante la justicia y recordó que un mes atrás la familia de Pecci le transmitió a las autoridades colombianas que era necesario garantizar la seguridad de los testigos del caso.
La periodista Claudia Aguilera, viuda de Pecci, envió la semana pasada tres cartas para reunirse con las principales autoridades colombianas vinculadas al caso: el director de Policía, la ministra de Justicia y la fiscal general de la Nación. El miércoles 8 se llevó a cabo una primera reunión virtual entre la Fiscalía General de Colombia y los abogados de la familia Pecci.
Pecci y el operativo “A Ultranza Py”
Pecci era fiscal de la Unidad Especializada de Lucha contra el Narcotráfico y tuvo a su cargo la mayor operación antidrogas de la historia de Paraguay. El operativo “A Ultranza Py” se desplegó en marzo de 2022, dos meses antes del magnicidio, pero había empezado en 2019 en la órbita de la Secretaría Antidrogas (Senad) paraguaya, en cooperación con la DEA, Europol y la Dirección General de Represión del Tráfico Ilícito de Drogas (DGRTID) de Uruguay. La participación de la Brigada Antidrogas uruguaya se explica por el papel central que tenía Marset en la organización criminal.
Tío Rico y Marset, que todavía sigue prófugo de la justicia, coordinaron el envío de decenas de contenedores hacia Europa y África entre 2020 y 2021, según las escuchas telefónicas del operativo. Solamente en ese período fueron incautados 17.340 kilos de cocaína que pertenecían a la organización, por los que iban a cobrar 433 millones de dólares.
Los vínculos de Marset y el clan Insfrán con el expresidente Horacio Cartes (2013-2018) son múltiples e incluyen la participación de otro ciudadano uruguayo: Federico Ezequiel Santoro Vasallo, identificado por la Inteligencia paraguaya como un jugador clave en la estructura del lavado de activos de Marset. Tras la orden de captura, Santoro Vasallo fue detenido en 2023 y extraditado a Estados Unidos en julio de 2024.
Por otra parte, este viernes 10 se realizó la audiencia final del juicio de extradición de Gianina García Troche, la esposa de Marset. Ahora, la Audiencia Nacional Española tiene un plazo de 72 horas para resolver si acepta la solicitud del fiscal paraguayo Deny Yoon Pak, que investiga a García Troche por blanqueo de capitales, asociación para delinquir, narcotráfico y lavado de activos.