A finales de mayo, la Mesa Departamental del Frente Amplio (FA) de Maldonado emitió un comunicado en el que manifestó su rechazo a los dichos del concejal nacionalista, Óscar Freire, durante la sesión del Concejo Municipal de Maldonado del 24 de mayo.
El comunicado del FA señaló que Freire había respondido: “Es que los negros no quieren trabajar”, cuando la concejala del FA Irene Gonçalvez transmitió el pedido de organizaciones LGBT para que la Intendencia Departamental de Maldonado (IDM) destinara los cupos laborales estipuladas por ley para la población trans, afrodescendiente y con discapacidad en el sorteo de los Jornales Solidarios.
Andrés Rapetti, alcalde de Maldonado, informó que el Directorio del Partido Nacional se reunió virtualmente este lunes para evaluar el comunicado del FA. Tras leer las actas de la sesión del Concejo Municipal de Maldonado, el partido expresó su apoyo y solidaridad al concejal fernandino y exhortó a la oposición a revisar sus expresiones. Para el alcalde, el accionar del FA fue “desmesurado” y “apresurado” debido a que no contaba con el acta de la sesión como elemento probatorio.
Rapetti señaló que el desacuerdo de Freire con la aplicación de las cuotas refleja su posición como persona afrodescendiente. “Es un tema personal de él. La ley no está hecha para gustar, sino para ser acatada. Como afrodescendiente tiene una postura y está en su derecho de tenerla”, comentó. Por otra parte, aseguró que no advirtió racismo en los dichos del concejal, sino “al contrario”.
“Enviamos las actas y una vez evaluadas por parte, no solo del directorio, sino también del colectivo afronacionalista que integra el PN, entendimos que había una tergiversación absoluta. El directorio le mandó su apoyo por lo que había sucedido: un hecho poco feliz, apresurado y desmedido”, expresó Rapetti en entrevista con la diaria. Agregó que recibió mensajes de apoyo incluso de personas del FA, que le plantearon su desacuerdo con el comunicado.
La senadora nacionalista Gloria Rodríguez dijo que las expresiones del concejal Freire que se leen en el acta de la sesión del concejo no coinciden con la expresión que emitió el FA en el comunicado. No obstante, Rodríguez consideró que los conceptos que expuso Freire están “un poco equivocados”. Según la desgrabación de la sesión del 24 de mayo, el intercambio entre Gonçalvez y Freire fue el siguiente:
—Maldonado está muy atrasado con respecto a brindar espacios laborales para las personas trans, afro y con discapacidad y esta quizás es una oportunidad para empezar a revertir la cifra, manifestó Gonçalvez .
El concejal Freire ingresó a la sesión en lugar del concejal Fabio Zapico y pidió una intervención:
—Yo nunca pensé que en estos tiempos fueran tan discriminatorias las personas blancas con los afro. Personas blancas, personas negras: somos personas al fin. ¿Por qué tiene que haber un cupo para personas negras? No te digo para aquellas personas que tienen problemas, pero para las personas blancas, negras, amarillas, coloradas o blancas leche. ¿Cómo es que se llaman? Albinos. No tienen porqué haber un cupo extra. ¿Qué diferencia hay entre una persona blanca y una persona negra? Somos discriminatorios a lo último. Los discriminatorios son ustedes.
—Se llama discriminación positiva. Es una herramienta política, compañero, que sirve de reivindicación. Tiene que ver con la baja empleabilidad que tienen las personas por su aspecto, por su color, respondió la concejala.
—Pero por ahí son más inteligentes los negros y no quieren trabajar. ¿Y por qué los van a obligar a trabajar? Pero no tienen por qué discriminarlos, profirió Freire.
—Los colectivos afro hacen esta reivindicación y lo plantean. Si usted estudia un poco en el Parlamento va a ver quiénes son los colectivos que piden estos cupos. No estoy hablando de algo que yo haya inventado, lo estoy diciendo porque en este momento tengo la oportunidad de hablar de esta reivindicación, que es específicamente de estas personas organizadas.
En el sorteo de los Jornales Solidarios de Maldonado, la IDM no contempló el cupo laboral de 4 % para las personas con discapacidad, de 8% para las afrodescendientes y de 1% para las trans. Al respecto, Rapetti consideró que el PN está de acuerdo con el concepto de “dicriminación positiva”, más allá de la posición del concejal y de las decisiones de la IDM.
Según el alcalde el cumplimiento de la cuota “no pasa solo por la cuestión partidaria” y afirmó que hay que propender a que se respete la legislación vigente.