Una veintena de profesores que ocuparon el martes 15 el liceo Mariano Soler de San Carlos, conocido como el liceo 1, en el marco del paro nacional de 48 horas en la educación, fueron desalojados por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) por orden de la Dirección General de Educación Secundaria.
Alejandro Fernández, vocero de la filial carolina de la Federación de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes), declaró a la diaria que se retiraron “de forma pacífica” y destacó la participación de madres y padres de los estudiantes que se acercaron y movilizaron por su lado, en rechazo al mayor problema que afronta la comunidad educativa por estos días: el anunciado cierre del edificio anexo al liceo 1, adonde asisten 250 adolescentes con necesidades especiales.
Tras el desalojo, los docentes se reunieron en la Casa del Maestro de la ciudad con referentes políticos, a quienes explicaron la situación que provocará el cierre del edificio anexo del liceo 1 y otras consecuencias de la transformación educativa en curso. Aunque fueron convocados políticos de todos los partidos, sólo asistió un grupo “importante” de candidatos a la diputación por el Frente Amplio, señaló Fernández.
Paralelamente, padres, madres y estudiantes se autoconvocaron en las puertas del edificio anexo, munidos de una carta en rechazo al cierre de este centro hasta que se construya el tercer liceo prometido por el gobierno nacional para la ciudad. Allí juntaron firmas para destinar a la Inspección Regional de Secundaria y que esta la eleve a quien corresponda, dijo a la diaria la vocera de la comunidad, Daniela Toloy.
“En la carta exponemos las diversas problemáticas que se generarán con el cierre del anexo, que afectará a adolescentes que requieren un tipo de contención especial. Consideramos sumamente necesario que este centro continúe y que además se resuelvan los problemas de superpoblación que afectan a los grupos de liceo 1”, resumió la vocera.
Foto: Natalia Ayala
Campaña de firmas contrarreloj
Del anexo el grupo de madres, padres y estudiantes marchó hacia la Casa del Maestro y se apostaron en la vereda, a esperar que los políticos escucharan sus planteos. Entregaron la carta con su postura sobre la situación y anunciaron que continuarán juntando firmas este miércoles, para entregar a primera hora del jueves a la Inspección, ya que ese día se redistribuirían los nuevos grupos.
Los lugares establecidos para firmar por la continuidad del anexo son: Café Velaris, Kiosco 25, Pequeños Cocodrilos, Anexo Liceo, kiosco frente a la escuela 3, McPato, Casa Rodríguez Matta, Tienda de Raciones, Gimnasio Punto Vital, Heladería Pecas y Tienda Morelia.
Toloy destacó la “alta respuesta de la comunidad carolina”, incluyendo a padres de escolares de sexto año que ya no tienen la opción de inscribir a sus hijos para cursar en el anexo durante 2025. También de aquellos a quienes se les asignará un centro alejado de su barrio, sin contar con facilitades para transportarse.
“Hay consenso total en que se mantenga el anexo. La población entera ha respondido y a la movilización se acercó muchísima gente de todas las edades, incluso quienes no tienen hijos liceales. Entienen que es urgente y necesario que las autoridades den marcha atrás”, relató Toloy.
Agregó que los candidatos a la diputación “salieron, escucharon y brindaron su apoyo, pero la respuesta en general es que para que haya marcha atrás hay que seguir movilizándose. Se espera que en la mañana del viernes haya autoridades de la educación en el liceo 1, oportunidad que este grupo de padres y madres aprovechará para insistir en que se revea la medida.
Foto: Natalia Ayala
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