La zona de La Gorgorita, en la desembocadura del arroyo Maldonado, será la plataforma de lanzamiento de la primera Gala de Luces que la Intendencia de Maldonado (IDM) organiza en este 2025; la segunda tendrá lugar en Piriápolis el 23 de febrero. Promocionado por su valor “cultural y turístico” y como un entretenimiento “para toda la familia”, el show pirotécnico de La Barra comenzará a las 22.00 de este viernes 31.
Se espera que asistan cientos de personas, aunque esta semana casi treinta organizaciones socioambientales pidieron a la población que no avale estas actividades con su presencia. Lo plantean como “una señal” de rechazo popular a los “efectos nocivos que generan sobre el ambiente costero y las personas vulnerables”, y porque “no cuentan con autorización ambiental previa del Ministerio de Ambiente (MA)”.
La gerenta del Área Evaluación de Impacto Ambiental del MA, Rosario Lucas, explicó, en diálogo con la diaria, que este tipo de actividades no requiere de Autorización Ambiental Previa. Este requisito, previsto en el artículo 7° de la Ley de Evaluación del Impacto Ambiental, sólo aplica para “construcciones u obras que se proyecten” dentro de la faja de protección costera, puntualizó.
No obstante, aclaró que si la ubicación de los artefactos explosivos implica el ingreso de vehículos a la playa o la implantación de infraestructura en la arena, la Intendencia de Maldonado debería tramitar un permiso especial como el que solicitan los organizadores de fiestas sunset o desfiles en los paradores costeros durante la temporada estival.
Este trámite es exigido en función de la ley de “Regulación del ordenamiento territorial y desarrollo sostenible del espacio costero del Océano Atlántico y del Río de la Plata”, entre cuyos objetivos se encuentra “la reversión o mitigación de los impactos negativos sobre el ambiente y sus ecosistemas, derivados de los usos del suelo o espacio marítimo, así como de las actividades que allí se realizaran”.
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“En nuestra área, la normativa refiere a la infraestructura en el ecosistema costero, en las dunas, por eso velamos. No hay otro marco”, indicó Lucas. A su vez, opinó que si las autoridades de la IDM nunca solicitaron tal permiso es porque consideran que las actividades pirotécnicas no tienen impactos negativos que revisar o mitigar.
La jerarca remarcó que no conoce el proyecto, ni cómo opera la IDM en estas galas. “Si ellos tramitan el permiso, ahí el ministerio les indica medidas de mitigación, pero nunca llegó una solicitud acá”, apuntó.
Para que el Área Evaluación de Impacto Ambiental tome alguna medida a futuro, las denuncias que llegan por parte de vecinos u organizaciones deberían aportar pruebas -fotografías o videos- que permitan analizar lo que ocurre, concluyó.