Desde la ciudad francesa de Lyon, donde estuvo en el marco de su gira por Europa, el presidente chileno, Gabriel Boric, se refirió a las declaraciones de su par brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, quien apuntó a la juventud de Boric y a su “ansiedad” para que todos los países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) se sumen a la postura europea y reconozcan la agresión de Rusia contra Ucrania, en el marco de la cumbre con la Unión Europea que se llevó a cabo esta semana en Bruselas.
El mandatario trasandino de 37 años dijo que, si bien con Lula son “de la misma familia política”, pueden “tener matices en torno a esto, pero la posición de Chile es una posición de principios respecto de la importancia de la defensa del derecho internacional. Y en esto tengo la profunda convicción de que tenemos que ser categóricos, tenemos que ser claros, no podemos dejar ningún espacio a la duda, y eso es algo que a los ojos de la historia envejece bien”.
“Yo tengo un respeto infinito y mucho cariño, además, por Lula. Pero si me preguntan ¿quiere que termine la guerra? Sí, quiero que termine la guerra y creo que tenemos que ser muy claros en decir que esta es una guerra de agresión inaceptable, independiente, tal como dije en el discurso, de las posiciones que uno pueda tener respecto de las presidencias temporales de uno u otro país”, agregó Boric, de acuerdo a lo que consignó el diario chileno La Tercera.
Esta semana, tras la cumbre de Bruselas, en una conferencia de prensa Lula le restó importancia a que la Celac no haya tomado una postura de condena a Rusia y dijo que la insistencia de Boric sobre el tema se debe a que tiene la actitud de un “joven inquieto” a la hora de tratar de afrontar el conflicto.
“No tengo que estar de acuerdo con Boric; es su visión. Creo que la reunión fue extraordinaria. El encuentro fue extraordinario. Posiblemente, la falta de costumbre de participar en esos encuentros hace que un joven tenga más sed y más prisa, pero las cosas no son así”, dijo Lula al ser consultado sobre el tema.
El martes, el día final de la cumbre, Boric exigió públicamente a los integrantes de la Celac que fueran “enfáticos” en su declaración porque, según él, en el futuro, los países de América y el Caribe podrían estar en la misma situación que en la que está actualmente Ucrania.
Sin embargo, en el bloque de países de América Latina y el Caribe la posición no tuvo consenso y la posición de Boric no prosperó. Países como Nicaragua y Venezuela tienen una posición más alineada con Rusia, e incluso Lula, cuando habló sobre la guerra en curso, siempre se mostró más moderado a la hora de tomar una posición y señalar los problemas que involucran a ambos lados en la guerra.
El presidente brasileño de 77 años tiene una posición neutral e incluso promovió la idea de que un grupo de países no involucrados en el conflicto tengan un papel mediador, algo que por el momento no se concretó.
Pero pese a haberlo criticado inicialmente, Lula se mostró afectuoso con Boric y dijo que en el pasado él se comportó de manera similar. “Yo también estuve apurado. En el primer año de mi mandato, fui a la reunión del G7 y quería que las cosas se decidieran allí, en ese momento. Pero no funcionan así las cosas. En Bruselas estuvimos discutiendo la posición de 60 países. Por eso, tenemos que entender que no todo el mundo está de acuerdo con nosotros, no todo el mundo tiene la misma visión sobre los temas”, dijo el mandatario brasileño.