Alrededor de las 23.00 del viernes un terremoto dejó al menos 2.012 muertos, 1.404 personas en estado crítico y 2.059 heridos en Marruecos, según datos del Ministerio del Interior de ese país. El sismo de magnitud 7 tuvo su epicentro en las montañas del Alto Atlas, según el Centro Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Marruecos. Una réplica, de magnitud 4,9, se produjo 19 minutos después.
La mayoría de los fallecidos se concentraron en la provincia de Al Hauz y la segunda provincia más afectada es Tarudant. Por su parte, la Organización Mundial de la Salud señaló que el sismo afectó a unas 300.000 personas en la principal ciudad de Marrakech y sus alrededores.
La Federación Internacional de la Cruz Roja asiste a los equipos de la Media Luna Roja Marroquí en la búsqueda y rescate, y advierte que las próximas 48 horas son “decisivas en lo que a salvar vidas se refiere”, según palabras de la directora global de la Cruz Roja, Caroline Holt. “Es necesario trabajar para que haya un tratamiento digno de los cadáveres y para abastecer a la población con agua limpia”, agregó Holt.
El rey Mohamed VI decretó tres días de luto y activó un programa de emergencia para reforzar los servicios básicos, el suministro de agua potable en las zonas afectadas y la atención a todas las víctimas.
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