El plenario departamental de Rivera del PIT-CNT y el Sindicato de Profesores y Funcionarios de la Escuela del Estado de Rio Grande do Sul (CPERS) celebraron un acto conjunto el domingo por el 1º de Mayo, Día de los Trabajadores. El evento se llevó a cabo en la mañana y tuvo lugar en la plaza 18 de Julio, ubicada en la avenida Cuaró.
La proclama del PIT-CNT fue leída por Gilda Machado, de la Agremiación Federal de Funcionarios de la Universidad de la República, Sandra Reyes, de la Asociación de Maestros de Rivera, y Alejandra Rabaza, de la Intersocial de Rivera. La oratoria puso el foco en los asuntos que refieren al empleo, el salario y la preocupación de la central sindical por la reforma de la seguridad social.
En primera instancia, se hizo mención a la pérdida de salario real por parte de los trabajadores en los últimos dos años. Además, se dijo que “el adelanto anunciado por el gobierno no es suficiente” para hacerle frente al aumento de precios.
En el mismo sentido, se mencionó que no sólo los trabajadores “sufren la política económica de este gobierno, sino también las pequeñas y medianas empresas, los productores y feriantes”; todos aquellos que “producen para el mercado interno”.
Otro de los ejes de la proclama fue la defensa de las empresas públicas en un momento en que “la privatización gana terreno”. También se pidió que el Estado absorba a los trabajadores de las “empresas tercerizadas”, ya que eso “serviría para frenar la flexibilización laboral”.
El plenario departamental también manifestó su preocupación con respecto a la reforma de la seguridad social propuesta por el gobierno. Entre otras cosas se crítica que se aumentaría “la edad de retiro” y se mantendrían “los privilegios de la Caja Militar”.
La proclama brasileña
Una de las principales críticas de los representantes sindicales brasileños al gobierno municipal de Livramento es que no está cumpliendo con la “ley de piso” que establece los salarios mínimos para los funcionarios docentes. Los sindicalistas afirman que en este asunto la prefeita Ana Tarouco cuenta con la “complicidad del gobierno estadual y del gobierno federal”. También objetaron los recortes “de Bolsonaro al presupuesto de las universidades”.
Sobre la situación actual del país vecino, Adriana de León, integrante de CPERS, dijo a la diaria: “En Brasil tenemos un gobierno de extrema derecha, fascista, que no valoriza al trabajador”. Añadió que incluso “se han visto varios casos de trabajo esclavo”.
Por otro lado, señaló: “Hoy tenemos 12 millones de desempleados y también hay muchas personas con subempleos. Estos no cuentan con una remuneración con la que puedan hacer frente a sus necesidades básicas”.
En otro sentido, De León también dijo que la prefeitura de Livramento lleva adelante desocupaciones en la zona del lago Batuva, donde hay gente que vive “sin las mínimas condiciones”, pero por lo menos allí “tiene un techo para refugiarse del frío y la lluvia”. Para la sindicalista, estos problemas en materia de vivienda son “responsabilidad de los gobiernos”, que sin embargo “le dan la espalda a esta gente, como si de esa forma el problema fuera a desaparecer”.
Respecto de las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo en octubre en Brasil, dijo: “Los sindicatos tenemos un gran desafío. Los sindicatos no estamos para decirle al trabajador a quién debe votar y a quién no, pero sí debemos mostrarle qué partidos y candidatos defienden al trabajador”, y estos “no pertenecen a la derecha”, finalizó.
Una mayor articulación
Rabaza, de la Intersocial del departamento, en diálogo con la diaria comentó que se “necesita una mayor articulación entre los sindicatos de Rivera y Livramento”. Para eso “hay procesos que son específicos, tanto de un lado como del otro”, explicó.
En Rivera hay que “fortalecer todos los espacios sindicales para que la central tenga una mayor proyección política”, opinó. Asimismo, cree que hay que promover una mayor articulación entre “el movimiento sindical y organizaciones sociales” como los colectivos feministas y el activismo LGBTIQ+. Además, es necesario “fortalecer el diálogo con las organizaciones populares del medio rural”, ya que allí hay cientos de trabajadores que sufren las políticas “regresivas y antipopulares” del gobierno.
En tanto, sobre la situación en Livramento, Rabaza consideró que es “distinta y posiblemente más favorable” que en el departamento del norte uruguayo. Según contó, del lado brasileño el movimiento sindical tiene una mayor articulación con las organizaciones sociales, y a su vez existe “una fuerte presencia del Movimiento Sin Tierra”, que es una de las organizaciones populares “más maduras de América Latina”, valoró.