El 27 de setiembre el Ministerio del Interior tiene previsto abrir una licitación pública internacional para obtener un nuevo sistema de control fronterizo. Según informa este miércoles el semanario Búsqueda, el objetivo será el “registro de todas las personas que ingresen o egresen del Uruguay” mediante todas las vías de tránsito.
El nuevo sistema deberá “recopilar, analizar y proveer información inteligente acerca de la identidad y movimientos de pasajeros para facilitar la toma de decisiones ejecutivas en la prevención y detección de ilícitos”, establece el pliego del llamado al que accedió el semanario.
El objetivo del Ministerio del Interior es que en 12 meses a partir de la firma del contrato se pueda poner en funcionamiento el nuevo sistema, que se financiará con la tasa de “precio por servicio de seguridad”, que se le aplicará a cada pasajero que salga por vía marítima o fluvial de Uruguay. Es decir que los agentes navieros, como Buquebus o Colonia Express, deberán cobrar en el precio del pasaje esa tasa, retenerla y otorgarla luego al adjudicatario de la licitación.
Con el nuevo sistema se busca tener una identificación “fehaciente” de las personas y sus documentos, además de controlar otros datos como la visa, el permiso de menor y otros requerimientos que tiene la normativa de ingreso al país.
Además, se pretende que en tiempo real se pueda cotejar si el visitante está requerido en Uruguay o el extranjero, o si está en alguna lista de impedidos a viajar o requeridos por Interpol.
Entre las herramientas que se le exige tener a la nueva empresa están algunas que ya funcionan en el aeropuerto internacional de Carrasco, recuerda el semanario: por ejemplo, las pasarelas automáticas para migraciones, puestos de biometría con cámaras de identificación facial y escáner de huellas digitales, además de escáneres corporales. A su vez, se les pide que tengan 50 puestos de control móviles que se puedan desplegar a demanda.
Ideas previas
Ya había sido objetivo de la administración de Eduardo Bonomi la instalación de un nuevo sistema, pero el proceso no salió adelante. En 2018, se abrió un llamado y el pliego indicaba que la empresa uruguaya Dafiway SA tendría ventajas sobre posibles competidores en la licitación por haber presentado la iniciativa.
Sin embargo, las empresas extranjeras competidoras denunciaron el hecho, alegando que la empresa uruguaya no tuvo la idea original del nuevo sistema migratorio. En esa oportunidad una comisión asesora entendió que la oferta económica ganadora era una empresa alemana, pero al no cumplir con todos los términos del pliego, el llamado quedó desierto. En 2019, en plena transición entre los gobiernos, se abrió un llamado similar y las empresas extranjeras volvieron a protestar, hasta que en 2020 el entonces ministro del Interior Jorge Larrañaga clausuró el proceso.
En la gestión del actual ministro Luis Alberto Heber se realizó una audiencia pública para analizar información provista por las empresas interesadas, sin compromiso, aunque en esa oportunidad se les remarcó que la empresa uruguaya seguiría teniendo ventaja.
Así las cosas, la actual licitación, que se abrirá en las próximas semanas, tiene a Dafiway como beneficiaria del incremento en la evaluación de su oferta de 5% del puntaje final y no deberá abonar el importe de los pliegos de condiciones, por entenderse que fue la que presentó la iniciativa.