La ausencia de Riogas en el proceso de selección para el envasado de la distribuidora Ducsa -subsidiaria de Ancap que opera en el derecho privado- implicó forzosamente un nuevo esquema en el mercado del supergás. Desde marzo, cuando terminen los contratos que durante 15 años regularon el sector, 70% de las garrafas blancas de Ancap serán envasadas por Megal y 30% por Acodike. Las dos empresas que resultaron adjudicadas fueron las únicas en presentarse al llamado.
Actualmente Ducsa recarga sus garrafas en las plantas de envasado que operan Riogas y Acodike, que en realidad son propiedad de la empresa estatal. Por lo tanto, la salida de Riogas del envasado de Ducsa ocasionará una merma de trabajo e ingresos para la empresa, lo cual ha generado “muchísima incertidumbre” en el sindicato del supergás, que advierte que “peligran muchos puestos de trabajo”.
A través de un comunicado, Riogas expresó este jueves que no se presentó al llamado debido a que “muchas de las cláusulas” del pliego eran “inusuales, improcedentes e inconvenientes”. Según la empresa, la licitación contenía “numerosas obligaciones para el envasador con garantías y penalidades desproporcionadas”, pero “ni una sola obligación para Ducsa”. A su vez, las condiciones del pliego “permitían a Ducsa controlar aspectos inherentes a la organización del trabajo y la operativa del envasador que no están relacionadas con el nivel del servicio”.
Riogas sostiene que en el inicio del proceso licitatorio objetó formalmente el contenido del pliego, pero que, al no existir modificaciones, “no tuvo otra alternativa que la de no presentarse”. Según supo la diaria, Riogas no está evaluando ningún tipo de acción legal respecto al resultado del llamado.
En diálogo con la diaria, la presidenta de Megal, Rossana Bucheli, había manifestado su absoluta conformidad con el pliego de la licitación: “Nosotros estábamos de acuerdo con todos los términos que planteaba el pliego que Ducsa presentó. Nos pareció totalmente razonable y racional”.
En tanto, el presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, definió el proceso licitatorio como “exitoso, transparente y muy competitivo”, según declaraciones consignadas por la web de la empresa estatal.
Riogas: el cambio “podría generar pérdidas económicas” en Ancap
Por otra parte, Riogas advirtió que el nuevo esquema de envasado de Ducsa “podría generar pérdidas económicas a su controlante Ancap”. Señaló que, de acuerdo a los nuevos contratos que regulan el sector del supergás, Riogas paga el arrendamiento de la planta de envasado de Ancap mediante “un valor por tonelada envasada”. Entonces, al perder Riogas la mitad del envasado de Ducsa, Ancap perdería ingresos por una disminución en el pago por el arriendo. Esto no sería compensado por Megal ya que la empresa es dueña de su planta de envasado.
Consultado al respecto por la diaria, José Luis Alonso, representante de Cabildo Abierto (CA) en el directorio de Ancap, expresó: “No voy a opinar de lo que dice una empresa privada”. Sin embargo, sostuvo que gracias al resultado de la licitación Ducsa pagará un menor precio por la recarga de sus garrafas: pagará 8 pesos por kilo en lugar de 12 pesos por kilo. “Eso es un beneficio directo, nos sale más barato el envasado”, señaló.
Asimismo, el director por CA apuntó que, dado que actualmente Megal tiene la menor participación en el mercado, alrededor de 10%, resulta “bastante lógico que cotice más barato al tener más personal disponible y las instalaciones más ociosas, que es lo que en definitiva terminó pasando”.
Alonso relativizó la magnitud del cambio que se implementará el 1º de marzo. Mencionó que hoy Ducsa tiene una participación en el mercado de 20%, por lo que, regla de tres mediante, Megal tendrá un aumento en el volumen de envasado de 14%, mientras que Acodike incrementará el envasado en 6%. “No creo que cambie mucho la participación en el mercado porque Ducsa cambie de envasador”, subrayó.
Mencionó además que el margen de ganancia de las empresas de distribución “es de 36 pesos por garrafa”, lo cual es “bastante más de lo que recibe Ancap por entregar el producto”. Actualmente el porcentaje del precio de la garrafa que se llevan las distribuidoras es 54%, mientras que a Ancap le corresponde 27%, y existe una carga impositiva de 18%.
En tanto, el representante del Frente Amplio (FA) en el directorio de Ancap, Vicente Iglesias, dijo a la diaria que en principio “no es como dice Riogas”, sino que la empresa estatal “en realidad se ve beneficiada” con el resultado de la licitación, aunque puntualizó que todavía no ha tenido acceso a informes oficiales. Al igual que Alonso, destacó que a partir de marzo Ducsa pagará 8 pesos por kilo en vez de 12 pesos por kilo.
“Lo que sí está claro”, agregó el director por el FA, “es que ese beneficio que tanto dijo la mayoría del directorio que iba a tener el nuevo esquema debería ser trasladado a la población, como corresponde”. En tal sentido, recordó el último aumento de 15% en el precio de la garrafa de supergás en el ajuste mensual de enero. Hoy la recarga de la garrafa de 13 kilos tiene un costo general de 950 pesos.
Para Iglesias, si existe una mayor eficiencia en el proceso de envasado de Ducsa esto tendría que “ser reconocido en el precio del supergás al público”. “Si ahora tenés menos costos haceme el favor y pasalo a la garrafa, pasalo al precio, vamos por más”.