Destrozado, Fernando Pereira cargó el féretro de su amigo Mariano Arana. Una vez que el cajón estuvo en el auto negro del cortejo, se fue de la explanada de la Intendencia de Montevideo, llorando, hacia la Huella de Seregni, a una cuadra y media de distancia. Por ahí pasó la caravana y los frenteamplistas, que esperaban con banderas de su colectividad y de Uruguay, iniciaron un aplauso de varios minutos que ni siquiera fue interrumpido por el grito de una mujer: “Viva el Frente Amplio (FA)”. Los que estaban más cerca respondieron: “¡Viva!”.
Carolina Cosse, anfitriona del velorio que se realizó en el atrio de la sede comunal, casi no se despegó del féretro y sólo salió a la puerta a recibir a algunas personalidades como Ricardo Ehrlich, el exintendente que sucedió a Arana en 2005. A su lado estaban varios familiares del histórico dirigente de la Vertiente Artiguista, además de algunos integrantes del sector que también custodiaron de cerca el cajón, como el senador Enrique Rubio o el director vocal del FA en la OSE, Edgardo Ortuño, otro de los dirigentes que cargó el féretro al término del velorio.
Fue, sin dudas, una jornada triste para los frenteamplistas, que destacan con unanimidad la figura de Arana, a quien no sólo disfrutaron como intendente de Montevideo sino como senador, ministro de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente y como edil, y antes, durante la dictadura, lo vieron denunciando la demolición de obras de valor patrimonial con el Grupo de Estudios Urbanos, y también en el Centro Cooperativista Uruguayo.
“Es un ejemplo de compromiso, de unidad, de amor”
José Mujica, visiblemente emocionado, intentó resumirlo en una breve rueda de prensa: “Se fue uno de los hombres que más querían la ciudad, un hombre de arte para querer los muros, las esquinas, los símbolos”. “La gente se acuerda mucho del intendente, pero fue un tipo que peleaba con la dictadura por conservar el patrimonio”, dijo y luego, en este sentido, lamentó: “A veces viene el progreso de la piqueta y no tiene sensibilidad”.
Afirmó que Arana “sembró permanentemente” y que “los estudiantes de arquitectura que lo conocieron siempre hablaban de que era un enamorado, que ponía aparte del conocimiento la sensibilidad de un hombre superior”. “Fue bueno, en el buen sentido de la palabra. Es un ejemplo de compromiso, de unidad, de amor”, dijo Mujica, y agregó: “No es un compañero del FA, es un compañero de los orientales, pero fundamentalmente de esta ciudad, a la cual quería y adoraba”.
Finalmente, hizo una reflexión: “Miro la cantidad de veteranos que hay acá, estamos en la fila india. La muerte es la cosa más democrática que hay en el mundo, al menos por ahora. Me gustaría, a esa doña que siempre nos gana el partido, cuando se presente, decirle 'por favor, sirva otra vuelta'”.
Pereira, quien compartió años de militancia con Arana por su pertenencia a la Vertiente Artiguista, sector del que el exintendente fue uno de los fundadores, señaló por su parte que “el FA está de luto” porque Arana “le entregó al FA su vida entera”, por ejemplo, cuando fue, a su pesar, candidato a intendente en 1984, por la insistencia de Liber Seregni.
Para Pereira, Arana “es un imprescindible de la izquierda uruguaya”, pero, más allá del FA, “hoy el pueblo uruguayo siente una pérdida muy importante”. También recordó a Arana como “uruguayo, frenteamplista y vertientista”, en el sentido de que “primero se sentía uruguayo y luego frenteamplista, pero frenteamplista hasta el hueso, y luego defendía con todo el fervor del mundo la Vertiente Artiguista, por la cual fue senador y ejerció su banca de edil”.
El presidente del FA contó que la coalición de izquierda estaba preparando un festejo especial por sus 90 años, que cumplió meses atrás, y que ahora se pensará en otro tipo de homenaje. Por otra parte, comentó que el presidente Luis Lacalle Pou le escribió un mensaje en el que hizo llegar sus condolencias al FA y a los familiares de Arana. Pereira quedó en pasar el mensaje a los allegados del exintendente y trasladarlo a la Mesa Política del FA. Asimismo, sostuvo que “es un gesto que valora”.
Wilson Espinosa y Fernando Pereira este lunes, en el atrio de la Intendencia de Montevideo.
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“El que mejor entendió Montevideo”
Cosse, por su parte, brindó unas palabras a la prensa en el inicio del velatorio. “Fue el que sin duda mejor entendió Montevideo y la hizo siempre estar del lado de quienes más la necesitaban”. Lo destacó en “su rol de protector del patrimonio cultural de la nación” y “su rol en la defensa y en la promoción de la cultura”, principalmente con “la recuperación del teatro Solís”. “Un lujo de intendente, un gran compañero. Creo que no van a alcanzar las formas de recordarlo”, dijo y concluyó rememorando a Arana “siempre buscando la belleza para compartirla, para hacerla pública, en busca de la pública felicidad”.
Yamandú Orsi, a su vez, quien aseguró que la noticia fue “el sacudón más grande”, dijo que Arana es “una referencia” para quienes tienen “la responsabilidad de gobiernos departamentales”, en su caso, de Canelones. Aseguró que puso “la humanidad al servicio de la acción pública” y “eso rompió todos los cristales”, y además destacó que “jamás pasó la rayita de la descalificación”.
El senador Rubio, en tanto, dijo a la diaria que la Vertiente Artiguista siente “una tristeza y un dolor muy profundo”, pero “también un profundo sentido del agradecimiento”. “Para la Vertiente siempre fue el ícono, el referente central, el que transmitía la sensibilidad que nosotros aprendimos a querer, una manera de ver la realidad, una manera de ser iconoclasta en muchas cosas, una manera de tener una opinión distinta a lo políticamente correcto”, apuntó. Dijo que transmitió la política de “no perder la comunicación directa con la gente” y de “tener la capacidad para defender lo grande, pero también lo infinitamente pequeño, el lugarcito ese que había pasado desapercibido, la placita que había que reconstruir”.
Por su parte, Ehrlich declaró a este medio que “lo que transmitía” Arana “era que para poder desempeñar esta tarea” de intendente “había que querer mucho a la ciudad, y eso minimizaba todos los errores y justificaba todas las equivocaciones”.
“Recuerdo el encuentro que llamaríamos la transición, Mariano ya era ministro de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente. Yo estaba asumiendo la intendencia, vino acá y trajo una hojita con una cantidad de anotaciones a lápiz, y me dice ‘mirá, estas son cosas que me quedaron en el tintero’. Ahí yo encontré mucha inspiración”, dijo y aseguró que Arana fue “un maestro de muchas generaciones”.
Varios dirigentes de la coalición de gobierno se apersonaron en la intendencia para el velorio de Arana, mostrando respeto por su figura y destacando varias virtudes. Uno de ellos fue el dirigente del Partido Nacional y secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, quien aseguró que el gobierno estuvo en contacto con la familia del exintendente y le ofreció los honores de Estado, pero la familia entendió que no era conveniente. “Prestigió a la política nacional y al FA, no sólo por su capacidad profesional, sino por su calidez humana”, dijo en rueda de prensa. “Fue siempre una persona afable, respetuosa y nunca salió un agravio de su boca”, agregó.
El expresidente Julio María Sanguinetti, secretario general del Partido Colorado, también se hizo presente y sostuvo que “era imposible enojarse con Mariano”, con quien tenía “mucho vínculo personal”. La vicepresidenta Beatriz Argimón y el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, también concurrieron al velorio, al igual que otros dirigentes multicolores.