Culminados los actos protocolares que marcaron el traspaso de mando el 1° de marzo, el novel gobierno puso rápidamente en agenda un tema que fue protagonista durante la campaña hacia la elección nacional de 2024: la seguridad social. El lunes, el secretario de Presidencia de la República, Alejandro Sánchez, anunció que se prepara un “documento guía” con los “puntos a debatir” y plazos del diálogo de un proceso que irá más allá de la seguridad social, y tendrá como enfoque principal la “protección social”.
En la instancia también se dio a conocer que el economista, investigador y exintegrante del Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT Hugo Bai estará a cargo de las negociaciones y será el coordinador de la Comisión Sectorial de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) que, a su vez, coordinará el funcionamiento que tendrá el Ejecutivo en relación a este tema. Bai tiene un máster en Dirección y Gestión de Planes y Fondos de Pensiones en la Universidad de Alcalá.
Según comentó a la diaria Bai, en las primeras semanas se estará trabajando en diseñar la “arquitectura del diálogo”, es decir, en cómo será su dinámica de funcionamiento. Desde la Comisión Sectorial de la OPP se empezará a coordinar con las otras dependencias del Ejecutivo involucradas: Ministerio de Trabajo, Ministerio de Desarrollo Social, Ministerio de Economía y el Banco de Previsión Social.
Bai detalló que “la idea” es que dentro del Ejecutivo se pueda “acordar una serie de ejes temáticos que se van a incorporar en el diálogo”. En ese sentido, se definirán además “determinados plazos” que deberán “cumplirse” para así generar “los cambios” a los que se pretende alcanzar en el período. El economista admitió que el Ejecutivo “tiene algunas ideas”, pero destacó que de todas maneras se va a “escuchar a todos los partidos políticos con representación parlamentaria”, así como a la “sociedad civil organizada y a la academia” para que sean volcados “todos los insumos”.
Sobre la protección social, Bai comentó que se trata la atención del individuo a lo largo del “ciclo de vida”, incorporando así “no sólo temas de jubilaciones y pensiones, sino también temas de infancia y temas relativos a cuidados”. En ese marco, se buscará “tejer los acuerdos” entre los distintos actores, entre los que “probablemente” habrá un representante del Frente Amplio (FA) como fuerza política, independientemente de los representantes del Ejecutivo, indicó.
La visión de los actores
A grandes rasgos, los trabajadores y los empleadores conforman dos grandes grupos que tendrán una participación directa en esta instancia de diálogo social. Realizado el anuncio de Sánchez, la diaria conversó con referentes de ambos grupos sobre qué posición llevarán a esta mesa de negociación.
Por parte de los trabajadores, Karina Sosa, presidenta de la Asociación de Trabajadores de la Seguridad Social, valoró en diálogo con la la diaria el papel “muy propositivo” que mostró Sánchez en su anuncio de este lunes. Asimismo, adelantó que desde el movimiento social de trabajadores organizados entienden que no se le puede poner a este proceso “un plazo” porque se trata de “un trámite que no es simple”.
“Es una discusión que no va a ser fácil, que tiene demasiadas aristas, y que hay que atenderlas a todas y al mismo tiempo”, indicó la dirigente sindical. Recordó que los congresos del PIT-CNT desde 2008 vienen generando un “material acumulado” que se ha procesado en línea con “mejorar un estado de bienestar”, del que dijo que actualmente está “en niveles inferiores” a años anteriores.
Desde el sector empresarial, el presidente de la Confederación de Cámaras Empresariales, Diego O'Neill, valoró positivamente la visión “más integral” que propone el gobierno en línea con lo que se denominó protección social. En ese sentido, adelantó que se va a asistir a cualquier instancia de diálogo que se genere, pero apuntó que en lo que respecta a pasividades se considera “adecuada” la reforma realizada por el último gobierno. El empresario detalló que esa visión “no quita que pueda haber algún ajuste”, pero remarcó que sobre este punto no debería haber “cambios demasiado drásticos”.
Más allá de las pasividades, O'Neill enfatizó que “hay cosas que están definidas hace bastante tiempo”, por lo cual es “bueno revisar” y buscar evaluar el “margen para la mejora”. “Hay problemas nuevos y hay unanimidad de atender la pobreza infantil”, comentó.
Sosa adelantó que desde el movimiento social reflotarán las reivindicaciones incluidas en el plebiscito que impulsaron para las últimas elecciones, porque creen “muy necesario hablar de las AFAP y su rol en la vida pública de las personas”, así como poner en estudio “los 60 años de edad para el retiro”. Sobre las AFAP recordó que se entiende que se trata de un modelo que se “contrapone ideológica y económicamente a la vida de las personas y a la dignidad para la vida”.
“Nuestro eje central va a ser disminuir la participación de las AFAP”, remarcó Sosa. Agregó que también se pondrá foco en las “exoneraciones desmedidas a los grandes capitales”, entendiendo que se podrían dar, por ejemplo, a “los pequeños comercios de las ciudades del interior”. En ese sentido, enfatizó que se debe “atender más a otras capas de la sociedad que hacen un sacrificio para subsistir”.
O'Neill subrayó que para avanzar en la protección social se deberá dar un “redireccionamiento de recursos”, dado que “no se puede aumentar las cargas patronales ni de los trabajadores, ni tampoco aumentar el gasto público”. Reforzó que la clave estará en “ser más eficiente y reducir donde se puede para redireccionar recursos para áreas sensibles”.