El 14 de noviembre la Mesa Ejecutiva del Sindicato Anestésico Quirúrgico (SAQ) le solicitó a las comisiones directivas de las 14 sociedades científicas que lo integran que evaluaran “la recolección y firma de las renuncias a los cargos de sus socios a todo el mutualismo, del departamento de Montevideo”, dice el comunicado, al que accedió la diaria. El miércoles, la Junta Nacional de Salud (Junasa) –integrada por representantes de los ministerios de Salud Pública (MSP), Economía y Finanzas, del Banco de Previsión Social (BPS), de las mutualistas, de los usuarios y de los trabajadores– trató el tema y aprobó un comunicado que fue votado por unanimidad y se divulgó ayer. La Junasa expresa que considera “absolutamente desproporcionada y sin precedentes” la propuesta de renuncia masiva a los cargos en todas las Instituciones de Asistencia Médica Colectiva de Montevideo y que, de concretarse la medida, “se pondría en riesgo la estabilidad del Sistema Nacional Integrado de Salud, afectando la equidad, continuidad y oportunidad de las prestaciones”. La Junasa llama “a la reflexión” a todo el colectivo anestésico quirúrgico y asegura que evaluará la situación de forma permanente.
El SAQ reclama participación directa en el grupo 15 de los Consejos de Salarios y rechaza la representación del Sindicato Médico del Uruguay (SMU). Para justificar que la medida es desproporcionada, la Junasa aclara que este grupo rechazó la creación de un subrgrupo específico para el colectivo anestésico quirúrgico –como pedía el SAQ– y que, de acuerdo a la legislación, las organizaciones negociadoras son las más representativas, en este caso el SMU, que actualmente concurre acompañado por la Federación Médica del Interior (Femi). Agregó, además, que en la comisión creada por el grupo 15 para analizar la recategorización de los actos anestésico quirúrgicos está previsto que participe un delegado del SAQ, junto a los representantes del SMU y Femi. La Junasa expresó también que son desproporcionados los más de ocho días de paro que ha implementado el SAQ, a los que se sumará el paro de 48 horas previsto para el jueves 6 y viernes 7.
Julio de Fuentes, integrante del SAQ, explicó a la diaria que se ha “eliminado” al SAQ de los ámbitos de negociación; criticó que la comisión creada para la recategorización “no termina de comenzar a funcionar porque sucesivamente postergan las convocatorias”, que tiene un plazo de 90 días para expedirse y que “con la excusa de que ya no hay mas tiempo, puede llegar a resolverse nada menos que la recategorización en cinco minutos, sin que podamos opinar”. Consultado por la diaria, Arturo Echevarría, presidente de la Junasa, expresó que los últimos dos aplazamientos se dieron porque las mutualistas pidieron más plazo para entregar la información sobre el pago a los anestésico quirúrgicos, y que el miércoles volverán a reunirse; dijo que si es necesario pedir más tiempo para discutir el acuerdo, lo harán.
En cuanto a la posibilidad de renunciar de forma masiva a las mutualistas, De Fuentes expresó: “Nosotros somos empleados, como cualquier empleado tenemos derecho a renunciar a nuestros trabajos”. Aclaró que “no quiere decir que esto se esté llevando a cabo en este momento ni que sea inminente, pero si te ponen condiciones inaceptables tienes todo el derecho a renunciar”.
Echevarría respondió que “renunciar como empleados y pasar a ser trabajadores independientes es lo contrario a lo que tiene previsto el sistema de salud” y que “estamos ante el escenario de una corporación que se siente tan fuerte como para elegir otro escenario en el cual conseguir mejores cosas que las que tiene un trabajador, que tiene derecho a cobrar despido, licencia, aguinaldo. Ellos están diciendo que nosotros tenemos tanta fuerza, que somos tan corporativistas que preferimos ser no trabajadores para pelear por más ingresos que los que ya tenemos”, afirmó.
El jerarca explicó que “está probado en el mundo que el pago por acto termina impulsando a determinadas prácticas que son nocivas para la salud” y que el MSP quiere “terminar con el pago por acto como una exclusividad”. Los CAD son una aproximación, porque tienen 75% de pago fijo y 25% de pago variable. Echevarría reconoció que habrá quienes cobren menos con la recategorización, pero señaló que hay quienes cobran 800.000 pesos por mes. Enfatizó que “necesitamos recategorizar y hacer que la relación entre el tiempo, esfuerzo, conocimiento de algunos actos se recalibre para que al profesional más capacitado se lo tenga haciendo las cosas que son más delicadas, que llevan más tiempo y que el pago sea superior al que reciben”.
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