Cientos de socios de Casa de Galicia se reunieron este miércoles en una asamblea que comenzaron en la puerta del sanatorio y cuando excedieron ese espacio, se trasladaron a la quinta, que está en la manzana de atrás. Durante el encuentro, juntaron casi 700 firmas que acompañarán un recurso de amparo que presentarán ante la Suprema Corte de Justicia (SCJ), para rechazar la sentencia del juez Leonardo Méndez del 23 de diciembre, que determinó el cese de actividades en Casa de Galicia. Así lo informó en diálogo con la diaria uno de los socios, Eduardo Mirás. La decisión de recurrir a la SCJ la tomaron luego de que el juez emitiera, este martes, una resolución en la que declaró “inadmisible el recurso de apelación”, en respuesta a un recurso que había presentado la mutualista.
Los socios también resolvieron ir este miércoles a las 20.00 a la residencia ubicada en Suárez y Reyes, en donde el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, recibió a integrantes de la coalición de gobierno para cenar. Según Mirás, realizaron “una sentada pacífica frente a la residencia del presidente para entregar una nota, en la que se explica por qué [Casa de Galicia] no debe cerrar”, afirmó.
Además, convocarán a una asamblea general de socios entre el 8 y el 15 de enero, en la quinta de Casa de Galicia. Mirás explicó que es lo más pronto posible porque tienen que publicar la convocatoria en diarios. “La asamblea va a decidir los pasos a seguir porque hay un estatuto que hay que respetar y está avalado por el Ministerio de Educación y Cultura”, dijo, y resaltó que no se cumplió el estatuto, porque allí dice que “los únicos que pueden cerrar la institución son los socios”. También quieren saber cuánto es realmente la deuda de Casa de Galicia y consideran que tal vez puedan hacer una “fórmula de rescate entre los mismos socios, como pasó otras veces”. “Lo que pasa es que las autoridades nunca consultaron a los socios”, reclamó.
Con respecto a la posibilidad de que los socios sean absorbidos por otras instituciones de salud, Mirás respondió que esperan “que no llegue ese momento” pero que, si llegara, quieren “tener libre elección” y poder elegir entre tres o cuatro mutualistas al menos, “pero no que vengan a decirles a los socios a dónde tienen que ir, vivimos en un país libre y democrático”, señaló. De todos modos, dijo que le parece bien que las mutualistas por las que tengan que optar, si efectivamente se cierra Casa de Galicia, sean chicas, de menos de 100.000 afiliados.
Mirás lideraba la lista que competía con Alberto Iglesias, expresidente de la Comisión Directiva de Casa de Galicia, en las elecciones que iban a hacerse el 30 de octubre y que fueron suspendidas por la intervención del Ministerio de Salud Pública (MSP).
Consultado acerca de la gestión de Iglesias, que fue denunciada penalmente por el MSP, Mirás respondió que no ha tenido acceso a los números, y que de eso debe encargarse la Justicia. Sí comentó que “no compartía la gestión [de Iglesias] y por eso se formó un grupo que queríamos cambiar el sistema de administración, con participación de todos, inclusive la idea nuestra era darle participación al MSP para que estuviera de alguna forma como veedor dentro de la institución, y que [las sesiones de la] directiva fueran abiertas”, incluso a los trabajadores.
La asamblea que no fue
Para las 11.00 estaba convocada la asamblea de la Asociación de Funcionarios de Casa de Galicia (Afuncag), pero no llegó a hacerse porque, en realidad, no llegó a ser convocada por la mesa directiva del gremio, que aún estaba chequeando las más de 300 firmas que se presentaron para solicitar su realización. Según informaron a la diaria integrantes del grupo convocante, la mesa de Afuncag difundió por redes que no había llamado a la asamblea y advirtió a quienes estaban trabajando que si dejaban sus puestos, corrían riesgo de recibir represalias de la jefatura. “No nos han escuchado, no nos dejaron leer las mociones” en la asamblea del lunes, reclamaron. Este sector acompañó este miércoles a los socios en la movilización afuera de la residencia presidencial.
En las primeras horas de la tarde, la mesa directiva de Afuncag emitió un comunicado en el que informó que a las 11.00 habían mantenido una reunión con el actual equipo de dirección de Casa de Galicia, quienes les informaron variados asuntos: que “se mantendrá la continuidad de todos los servicios trabajando en las mismas condiciones hasta que le den la orden de lo contrario”, incluido el sanatorio y las policlínicas; que se pedirá la compra de medicamentos, insumos generales y médicos para 15 días; que la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) cubrirá las faltantes; que se mantendrán y pagarán todas las retenciones de sueldos que tienen los trabajadores; que seguirán los convenios de funcionarios para acceder a medicamentos y estudios; que las horas extras serán por excepción y sólo para lo asistencial; y que los trabajadores que facturan cobrarán con normalidad. El texto deja constancia que renunció la jefa de personal y que en su lugar se designará un jefe interino, por la imposibilidad de contratar personal.
“Transición en forma ordenada”
A la salida del Consejo de Ministros, al ser consultado por la prensa, el titular del MSP, Daniel Salinas, expresó que no se había tratado el tema de Casa de Galicia. “Estamos con una hoja de ruta, nos hemos reunido con todos los actores de la salud”, entre los que mencionó a la Federación Uruguaya de la Salud, el Sindicato Médico del Uruguay, el Sindicato Anestésico Quirúrgico y Afuncag. “Pensamos que tenemos una solución que se aproxima a lo mejor posible en cuanto a la absorción de los socios y a la preservación del sanatorio de Casa de Galicia, donde seguramente muchos de los asociados van a poder seguir asistiéndose, de acuerdo a lo que es nuestra idea de maniobra”, informó.
Al ser consultado por los plazos, respondió que no manejan ninguno en especial: “Van a ser los plazos necesarios que lleve armar esta transición en forma ordenada, porque nos interesa asegurar tanto la continuidad asistencial de los socios de Casa de Galicia como también hacer muy prolijo el traspaso de los trabajadores a las diferentes instituciones”. Acotó que durante la mañana había estado reunido con el presidente de la Junta Nacional de Salud, Alberto Yagoda, y con el subsecretario de Salud, José Luis Satdjian, para evaluar el perfil de cargos médicos y no médicos. “Queremos que sea una transición ordenada y contamos con la colaboración de los gremios, que están integrados a la mesa de transición”, aseguró.