159.846 es el número de personas inscriptas para la segunda fase del programa Oportunidad Laboral, según informó El Observador. Hay 90.000 inscriptos menos que en 2021, cuando la cifra fue 250.000. En esta edición, el programa ofrece 10.000 puestos de trabajo, un número mejor con relación al año pasado, en que se otorgaron 15.000 lugares. Esta será la última etapa del programa, también conocido como “jornales solidarios”, que será desde julio a octubre de este año.
Montevideo y Canelones son los departamentos que tuvieron más inscriptos: 46.543 y 23.504, respectivamente. Le siguen Salto con 10.183 personas, Paysandú con 8.434 y Rivera con 8.119. Además, el portal Agesor informó que en Soriano se postularon 4.558 personas para 283 puestos disponibles.
En la edición de 2021, en la capital se inscribieron 79.693 personas, mientras que este año se inscribieron 33.150 personas menos. En Salto el número de inscriptos fue de 14.548, lo que significa que este año hay 4.365 solicitantes menos. Por el lado de Rivera, la cifra fue de 12.523 anotados, 4.404 más que en esta oportunidad.
Por su parte, el intendente de Maldonado, Enrique Antía, informó que este año en el departamento hay 535 cupos y se inscribieron 7.125, casi la mitad de los que se presentaron el año pasado, que fueron cerca de 12.000. Antía explicó, en conferencia de prensa, que la baja se debe a que Maldonado es el departamento con menor tasa de desempleo del país, según los datos del Instituto Nacional de Estadística.
Entre el final de esta semana y el principio de la siguiente, las intendencias de cada departamento anunciarán el resultado de los sorteos. En Canelones el sorteo se realizará el próximo 24 de junio, mientras que en Florida los sorteos se harán desde el 24 hasta el 29 de junio, cada día en una serie de localidades distintas.
El salario nominal que recibirá cada trabajador continuará siendo de $ 12.500 nominales. Además, el senador del Partido Nacional, Sergio Botana, explicó durante la sesión en el Parlamento, en que se aprobó el proyecto, que a partir del tercer mes de trabajo se le permite a los beneficiarios tener una actividad laboral complementaria de ocho jornales con la idea de “mejorar las posibilidades de inserción laboral”.