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Elbia Pereira, el 11 de junio, durante su discurso en la 112.ª reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo. Foto: captura.

PIT-CNT denunció en la OIT violaciones del gobierno uruguayo a la libertad sindical y el espionaje contra Marcelo Abdala

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La secretaria general de la central obrera, Elbia Pereria, también mencionó las sanciones a militantes de la educación, represiones violentas en manifestaciones pacíficas y el nuevo régimen de licencias médicas para el sector público.

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Leído por Andrés Alba.
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La secretaria general del PIT-CNT, Elbia Pereira, fue la encargada de tomar la palabra en nombre de la central sindical en la sesión plenaria de la conferencia anual de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en Ginebra. En su intervención, de poco más de cinco minutos, la dirigente denunció que el gobierno uruguayo ha llevado adelante varias acciones contra la libertad sindical “en un sentido amplio”.

“Como ejemplo de lo que venimos señalando, hoy el gobierno de nuestro país lleva adelante acciones que atentan contra la libertad sindical en un sentido amplio, sancionando a militantes sindicales de la educación pública por ejercer su derecho a la libertad de expresión, modificando unilateralmente el régimen de certificaciones médicas generando la rebaja de salarios de amplios sectores de trabajadores del Estado en abierta violación al Convenio Internacional de Trabajo 151, reprimiendo violentamente manifestaciones pacíficas y realizando actos de espionaje contra el presidente de nuestra central sindical”, señaló en el plenario.

Entre otros puntos, Pereira hacía referencia a la denuncia que se presentó contra el nuevo régimen de certificaciones médicas este lunes ante la OIT y a la investigación que dispuso el exjefe de seguridad presidencial, Alejandro Astesiano, para involucrar al presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala, a una boca de venta de droga, con conocimiento del presidente Luis Lacalle Pou. Además, aludía a la represión policial a una movilización del sindicato de la pesca.

“Hoy nos enfrentamos a un discurso que sustenta una falsa oposición entre libertad para trabajar versus trabajo decente; basado en una equivocada idea de modernidad, deja atrás cualquier regulación del trabajo, señalando además esta condición como inevitable y condicionada por el avance de la tecnología. Un derecho tan caro a la humanidad como es la libertad es utilizado como herramienta para cuestionar la regulación del trabajo y la protección social”, expresó Pereira al inicio de su oratoria.

Asimismo, la secretaria general del PIT-CNT sostuvo que estas políticas “profundizan las desigualdades generando sociedades donde la brecha entre ultrarricos y pobres es cada vez mayor, y con mayor y especial impacto sobre las mujeres”. En esa línea sostuvo que el trabajo “ya no es una herramienta que permita superarse”, sino que condena a grandes sectores de la sociedad a “sobrevivir sin perspectiva de futuro”, lo que genera “descontento y desconfianza en las instituciones”.

A modo de ejemplo, Pereira mencionó el caso del trabajo en plataformas, “en el que se llega incluso a adaptar las legislaciones locales a las exigencias de estas transnacionales, bajo el argumento de que, aunque de baja calidad, brindan empleo”. “El modelo de negocio de estas empresas se basa en la sobreexplotación del tiempo de trabajo, cargar los costos en los trabajadores y trabajadoras, falsos autónomos, y sobrecargar los sistemas sanitarios y de seguridad social con la atención de personas que exhiben una alta tasa de siniestralidad”, agregó.

La dirigente sindical manifestó que “derechos fundamentales” que reivindica la OIT actualmente “son señalados como privilegios de un pequeño grupo de trabajadores y trabajadoras” y “las políticas ya no se orientan a lograr una mejora para la mayoría sino a la eliminación de la protección de quienes aún gozan de ella”.

“Las sociedades deben tomar medidas urgentes que aseguren un medio de vida para las personas mediante el trabajo garantizado para quienes no acceden al mercado de trabajo, asegurando el trabajo decente a quienes sí lo hacen, protegiéndoles contra la pérdida del mismo y estableciendo jornadas compatibles con la vida en sociedad”, expresó, y agregó que “sin dudas necesitamos un nuevo contrato social y el camino debe ser exactamente el contrario al que venimos recorriendo, que sólo ha logrado generar miseria y conflictos”.

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