Es la esquina donde Guerra y Pereyra, los personajes de La uruguaya, la novela del argentino Pedro Mairal, y la película del mismo nombre, que sigue en cartel, se toman sus buenos whiskies (la etiqueta más cara de la carta). Era una locación cantada, porque es un bar tradicional, bar de luz blanca y vitrina, al que llega el aire salitre de la rambla y todo el sol, o un cruce de vientos implacable, algunos otros días.
Joaquín Casavalle tomó contacto con Alejandra, la hija de Lourdes y Edelmiro, los dueños del Santa Catalina, a principios del año pasado. Las negociaciones del traspaso quedaron encajonadas por un buen tiempo, durante el cual Casavalle y parte del equipo que sacó adelante Montevideo al Sur se propusieron reflotar el bar Paysandú. Hace cuestión de cinco meses se reavivó el proyecto del Santa, como lo conocen los parroquianos.
Reunidos con la familia que lo administraba, “les comentamos el desafío que para nosotros implicaba y sigue implicando. Parte del trabajo complejo y lindo que vamos a tener es cómo seguir representando la identidad de esa esquina”, dice Casavalle, ya todo un rescatista de viejos cafés y boliches montevideanos. “A diferencia de Montevideo al Sur y del Paysandú, es un bar que trabajaba fuerte, con una identidad muy marcada, era una esquina muy movida”. Dice que la firma del contrato fue un momento emotivo para quienes delegan el mostrador y sabe a la vez de la expectativa que genera la reapertura, fijada para la semana que viene.
Como forma de darle una continuidad al lugar, el borrador de la carta a estrenar sigue la misma estructura que su antecesora, y platos fríos como lengua a la vinagreta o matambre arrollado se ríen de la nostalgia. La lista de los platos calientes es otra confirmación de la gastronomía rioplatense, con milanesa con fideos, ravioles con estofado y canelones de choclo, por ejemplo. Al mediodía saldrán especiales como cazuela de porotos y pollo, mila de pescado, pastel de carne y pulpón al horno, y una sección de pizzería clásica, de horno a leña, seguramente sea el fuerte de la noche. Varias opciones de guarnición, tartas y pastelería redondean un menú amplio y sin complicaciones. De hecho, no van a tener coctelería sino tragos de corte y vermús, además de vinos y cervezas de litro.
En lo que respecta al espacio, las modificaciones están siendo las mínimas como para dejarlo funcional, de acuerdo a la época. Ahora colores como bordó, crema y dorado aparecerán en los toldos a rayas y otros detalles. “Reuniendo la cultura desde 1985”, reza el lema de la casa. “El servicio va a ser muy dinámico, va a dar la sensación de los bares de gallegos de antes, de ver a todo el equipo haciendo todo dentro del bar”, resume Casavalle.
Bar Santa Catalina (Ciudadela 1200, esquina Canelones) se reinaugura el jueves 28 de setiembre a las 18.00 y abrirá de martes a domingo de 10.00 a 2.00. Servirán cafetería desde la mañana, almuerzo, merienda y cena. Para 2024 prevén tener ciclos de lecturas y cantautores populares en vivo.
Hamburguesas argentinas por doquier
La hamburguesería argentina El Desembarco se consolida en Montevideo ya que a fin de mes inaugura su tercer local, que se agrega a los anteriores en Punta Carretas (21 de Setiembre 2702), que abrió en mayo del año pasado, y Pocitos (Benito Blanco 3350), que funciona desde hace cuatro meses. La nueva tienda estará ubicada en el Centro, en Andes 1163, con un espacio de 120 m2 que implicó una inversión de US$ 87.000.
Además, en noviembre la cadena se instalará en Punta del Este, a metros de la rambla, en plan delivery y take away, de camino a la playa. “Llegar a Punta del Este es un paso más de nuestra expansión en Uruguay. El éxito que han tenido las tiendas de Montevideo nos anima a proyectar un 2024 con al menos cuatro tiendas más en el país”, afirma Julio Gauna, socio fundador de la empresa.
Las hamburguesas artesanales de El Desembarco utilizan carne de novillo de primera calidad, pecho, tapa y aguja y son preparadas en el día, sin aditivos ni conservantes (tampoco se congelan). El menú ofrece veinte variedades, pero también sirven milanesas, sándwiches, panchos y propuestas veganas y gluten free.
La marca nació en el barrio porteño de Boedo en 2017. En lo que va de 2023 ya abrió 12 locales en Argentina, este año llega también a Entre Ríos y a la Patagonia, saliendo por primera vez de Buenos Aires. Además, cuenta con un local en Chile y acaba de abrir el primero en Miami.
Negroni week
Imaginen Florencia, 1919: el viajado conde Camilo Negroni le pide un “cóctel americano” a Forsco Scarselli, bartender del bar Casoni. Ese día, cuenta la leyenda, aquel se tomó la libertad de agregar gin a la usual mezcla de vermú y Campari. El centenario trago, inmortalizado como negroni, se sirve en un vaso old fashion, ancho, mezclando partes iguales de aquellos ingredientes y, como hizo Forsco, con un twist de naranja. El Negroni Sbagliato, que se puede traducir como “incorrecto”, sustituye el gin por champán, pero variaciones de todo tipo, hacia el picante, hacia el café, hacia los cítricos, son implementadas con frecuencia. Una buena oportunidad de experimentar las posibilidades de este aperitivo es buscar en la Negroni Week que está en curso hasta este domingo, los 40 bares adheridos, desde Baker´s hasta Baco, Polo Bamba e Il Tempo, en la cuenta @campari_uy.
Cena ecuatoriana
Una velada que reunirá gastronomía y música está agendada para las 20.00 del 25 de octubre en el Museo de Arte Precolombino e Indígena (MAPI, 25 de Mayo 279). El cantautor, pianista y productor musical John Peter amenizará una típica cena ecuatoriana que comenzará con sabor a mar, una dupla de ceviche de pescado y camarón; a la entrada seguirá un principal de carne colorada, esto es, fritada de cerdo, acompañadas de minitortillas de papa rellenas de queso y una colorida ensalada aderezada con salsa de maní, y finalmente espumilla, mousse de chocolate. El ticket para el concierto y la cena incluye copa de vino, agua o refresco por $ 1.400. Por reservas, dirigirse al correo contacto@mapi.uy.
Comé tus verduras
La lista inteligente que elabora quincenalmente la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM), es decir, las frutas y verduras de estación que se consiguen en el mercado en su momento óptimo y a buen precio, es, hasta el 2 de octubre, la siguiente: alcaucil, arándanos, habas, lechuga, limón, puerro, remolacha, zanahoria y zapallo kabutiá.