Dos de los equipos que ya cambiaron de técnico se enfrentaron en la segunda fecha del Intermedio en el estadio Belvedere, donde supuestamente nació el fútbol uruguayo. O al menos eso dice el muro a espaldas de la vacua tribuna visitante. Las banderas colgadas son como los cuadros de la casa de un muerto. O de un enfermo. Una traída de los pelos de lo que fue, una melancolía por la incertidumbre de un futuro ingrato.
Cerro se plantó en campo propio y la relevancia entonces estuvo en defensa, con Pablo Lacoste expeditivo, con Martín González confirmando el derrotero de la experiencia. Hubo pocas claras en el primer tiempo. Sin embargo en un desdoble inolvidable Federico Pereira anotó su primer tanto en Primera División. Para contestar Cerro siempre tiene a Leandro Paiva, que primero probó en un tiro libre que embolsó el arquero como si supiera la intención. En la segunda también de lejos, contra el palo, abajo, aseguró el empate.
En el segundo tiempo Cerro adelantó líneas. Como si se diera vuelta la forma. Es que el descenso aqueja. La tabla es dura. Fue sin embargo tras un saque de aire larguísimo de Rodrigo Formento que agarró a la línea final negriazul corriendo de espaldas. En el entrevero y por la insistencia del nueve cerrense, la pelota dio en una mano y el propio Maicol Cabrera puso en ventaja a los de la Villa.
Un relator serrucho partidario le recordó a Gastón Filgueira aquel fatídico descenso con el negro de la cuchilla. Y otros menesteres acordes, a propios y ajenos. Con el micrófono y con el lápiz siempre es más fácil que adentro. Aflora esa impunidad de antaño, de gladiadores romanos. En un corte al límite del físico del Queque Christian Almeida, surgió un contragolpe que pudo ser, que marcó una nueva virazón en el trámite. La del contragolpe por el contraataque. Aunque Cerro manejaba los tiempos.
El final fue de locos. O de fútbol puro. Se le escapó al villero que se ahoga en esa mufa pesada. Que vuelve a guardar en la mochila la durísima tabla al revés. Liverpool, primero con el zaguero Franco Romero que la encontró en el área y casi enseguida, con el ímpetu del empate sobre el final, con Juan Ignacio Ramírez que convirtió el definitivo 3 a 2 cardíaco.
Detalles
Estadio: Belvedere
Árbitros: Adrián Pereira. Asistentes: Gustavo Márquez Lisboa y Federico Piccardo.
Liverpool (3): Andres Mehring; Christian Almeida, Camilo Cándido, Federico Pereira, Franco Romero; Martín Fernández (80’ Lucas Ribeiro), Martín García, Agustín Ocampo (65’ Fabricio Díaz), Hernán Figueredo; Ezequiel Escobar (80’ Diego Cor), Juan Ignacio Ramírez. Entrenador: Marcelo Méndez.
Cerro (2): Rodrigo Formento; Nahuel Furtado, Pablo Lacoste(76’ Mario García), Martín González, Gastón Filgueiras; Sebastián Cáceres (76’ Nicolás Ramos), José Tancredi, Felipe Klein, Leandro Paiva; Franco López (76’ Ignacio Yepes), Maicol Cabrera (85’ Joaquín Boghossian). Entrenador: Juan Jacinto Rodríguez.
Goles: 25’ Federico Pereira (L), 30’ Leandro Paiva (C), 55’ Maicol Cabrera (C) , 90’ Franco Romero (L), 91’ Juan Ignacio Ramírez (L)