Deporte Ingresá
Deporte

Déborah Rodríguez en su debut en los Juegos Olímpicos de Tokio este jueves 29 de junio.

Foto: Facundo Castro

Déborah Rodríguez: “Mi entrenador nunca me soltó la mano”

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

Luego de clasificarse a semifinales, la atleta valoró el apoyo de Martín Mañana en los momentos más duros.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

Déborah Rodríguez consiguió este viernes, en la mañana japonesa, uno de los más grandes logros de su carrera deportiva, al acceder a las semifinales de los Juegos Olímpicos y posicionarse entre las 24 mejores atletas de los 800 metros.

Visiblemente emocionada tras este excelente rendimiento, la uruguaya habló al salir de la pista.

“Estoy re feliz. Luché hasta el final. Dije: voy a dejar la vida si es necesario en esta carrera, y fue lo que hice”, contó sobre la quinta serie, en la que terminó en segundo lugar para ganarse la clasificación.

“Estoy muy agradecida con todos los que estuvieron conmigo, los que me apoyaron y confiaron en mí. Sobre todo con mi entrenador, que me ha visto pasar un momento muy difícil y nunca me soltó la mano; eso es lo más importante”, resaltó la atleta. Su entrenador, desde que ella volvió de Estados Unidos en 2020, es Martín Mañana, quien también entrenó a los maratonistas olímpicos en 2016, Martín y Nicolás Cuestas.

“A veces, cuando uno pasa momentos difíciles, momentos que es una racha tras otra de dificultades, pierde un poco la confianza y la seguridad. Mi entrenador me ha ayudado muchísimo en este proceso, mi psicólogo también. Hacemos un equipo muy lindo y sobre todo trabajamos la parte emocional, que para mí fue lo más desafiante”, explicó sobre el último año, en el que ha afrontado los cambios propios de un ciclo olímpico extenso por la pandemia, en el que no pudo terminar su preparación viviendo en el extranjero como pretendía.

“Uno además de ser atleta es un ser humano, tiene millones de situaciones buenas y malas, y él supo estar conmigo en todo momento”, destacó la corredora sobre el apoyo recibido de Mañana. “Agradezco a mi familia también, que es lo más”, dijo en el cierre la semifinalista celeste.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

¿Te interesa el deporte?
Suscribite y recibí en tu email la newsletter de deporte.
Suscribite
¿Te interesa el deporte?
Recibí la newsletter de deporte en tu email todos los domingos.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura