Ingresá

Problemas en la cadena global de suministros obligan a Papá Noel a fabricar juguetes por primera vez en varias décadas

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

El barbudo y canoso anciano había cerrado su planta en el Polo Norte; algunos duendes convocados para trabajar nuevamente califican la situación como “una terrajada.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

A fines del siglo pasado, Papá Noel decidió enviar a todos sus duendes al seguro de paro y comenzar a encargar a fabricantes chinos los juguetes que entrega a los niños todos los 24 de diciembre. Pero la crisis en la cadena global de suministros llevó al anciano bonachón a reabrir su fábrica de juguetes en el Polo Norte. “Apostar a los juguetes chinos hubiera sido un riesgo muy grande, que yo no estaba dispuesto a correr. Los llantos de un niño de siete años que se quedó con las manos vacías no se pueden consolar con el argumento de que la pandemia provocó una distorsión tan grande en las cadenas de suministros globales que un container proveniente de China puede demorar seis meses más que de costumbre para llegar al Polo Norte. Ante esta situación, me vi en la necesidad de reinaugurar mi fábrica de juguetes”.

La noticia generó diferentes reacciones entre los duendes que habían quedado desempleados por la competencia china. “Yo qué sé, que me vengan a pedir que vaya a fabricar juguetes este año para echarme de nuevo al año siguiente porque la cadena de suministros se recuperó me parece una terrajada”, opinó uno de ellos. Pero para otro de los pequeños ayudantes de Papá Noel la situación “es una oportunidad para demostrarle al viejito que somos capaces de trabajar mejor que los chinos”. “Yo todavía no entiendo cómo hacen ellos para competir, porque nosotros ni siquiera cobramos, así que no sé cómo vamos a hacer. Pero estoy seguro de que podemos superarlos”.

¿Te interesa el humor de la diaria?
None
Suscribite
¿Te interesa el humor de la diaria?
Recibí el newsletter Humor en tu email.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura