El titular de la Fiscalía de Lavado de Activos, Enrique Rodríguez, opinó en una entrevista con el semanario Búsqueda que “capaz” no se “lava tanto dinero” en Uruguay y “creemos que sí”.
“Habrá que ver si en Uruguay se lava tanto dinero, en la magnitud que uno piensa que se lava, o capaz que no es tanta cantidad y creemos que sí. Eso uno nunca lo puede saber”, expresó y planteó: “¿Quién puede decir que Uruguay es un paraíso fiscal? Yo creo que no es así. El país ha sido bien calificado. Uruguay ha hecho todos los deberes a escala nacional e internacional y sigue mejorando”.
Desde que empezó a funcionar la fiscalía en febrero de este año y en años anteriores hubo pocas condenas por lavado de activos. Consultado al respecto y sobre el desempeño del organismo especializado, Rodríguez sostuvo que “no es que en Uruguay tenga que haber 50 condenas por año para que veamos que dio resultado haber creado una fiscalía”.
“Habrá la cantidad de condenas que tenga que haber cuando las investigaciones determinen las personas que cometieron delitos y se pueda responsabilizar a una persona. Que no haya condenas no quiere decir que no se trabaje, porque las investigaciones se hacen y son complejas, llevan meses o años”, añadió. El fiscal recordó que la fiscalía “no interviene de forma preventiva, tiene competencia de prevención. Interviene cuando se le da noticia de un hecho que tiene apariencia delictiva”.
Asimismo, Rodríguez planteó que en los casos de imputados por narcotráfico, contrabando, delitos tributarios y tráfico de armas, no implica que exista lavado de activos. “Si se hace un allanamiento en una boca, se incauta un poco de droga, dos motos, una cadena de oro y un reloj, ¿usted va a procesar por lavado de activos porque se compró dos motitos y una cadena de oro y un reloj?”, señaló. Y continuó: “el que vende chasquis en la esquina, y apenas junta unos pesitos se compra una motito, anda para todos lados, y lo ve todo el barrio. ¿Le parece que la persona quiere ocultar con un testaferro, disimular el producto que obtiene de un delito? Es el agotamiento del delito”.
En la misma línea, en los casos de condena de distribuidores de droga, el fiscal sostuvo que en esos casos los imputados son condenados por el “delito principal” y sus bienes son decomisados. En ese sentido, dijo que “de repente no hay necesidad” de que intervenga la Fiscalía de Lavado de Activos si el “fiscal que actúa en droga hace como un filtro: tengo la prueba de esto, de qué vende, sé cuánta droga manejaba, qué se compró y le incauté todo”.
No obstante, aclaró que si en una situación con similares características “vienen dos testigos y dicen que el hombre además tiene un supermercado que está a nombre de otra persona o que está manejando otro vehículo o que se lo ha visto en un balneario conocido en el casino. Ahí puede haber algo más. Entonces, lo procesa por droga y le pasa los antecedentes al fiscal de lavado de activos para que comience una investigación”.
Rodríguez también planteó que deben tomarse “con pinzas” los informes como la Evaluación Nacional de Riesgos de Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo, que sostienen que el sistema tiene pocos resultados en la materia y fue aprobado por el gobierno.
Por otra parte, el fiscal consideró que son necesarias algunas modificaciones legislativas para mejorar el combate al lavado de activos. Para el fiscal es necesario “adecuar la ley de lavado de activos es su terminología y algunos artículos que contiene la ley al nuevo Código del Proceso Penal, porque algunas cosas quedaron redactadas como si fuera el sistema inquisitivo, donde el juez dirigía la investigación”. Además, apuntó la necesidad de responder al reclamo internacional de creación del delito de enriquecimiento ilícito.
Por último, comentó el proyecto que tipifica los ciberdelitos “va a ser muy últil” porque “las estafas o el blanqueo se hace utilizando medios electrónicos, como criptomonedas”.