La Plaza del Entrevero fue el punto de encuentro de cientos de jubilados y pensionistas y, en menor medida, sindicalistas y jóvenes, que partieron desde allí hacia la plaza Independencia, en la mañana del viernes, en una nueva marcha convocada por la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (Onajpu). La plataforma de reivindicaciones era extensa, pero los reclamos principales tenían que ver con el aumento de 3% en julio, no a cuenta del ajuste de enero, sino de forma adicional, contra la pérdida de poder adquisitivo y en rechazo a la reforma jubilatoria.
“Nunca supe cómo hacen la cuenta para calcularte la jubilación”, le pregunta una mujer a Daniel Baldassari, exsecretario general de la Onajpu, mientras en 18 de Julio se va extendiendo una bandera con los colores de la organización, rojo y verde, que llega a ocupar toda una cuadra. Baldassari elabora una respuesta bastante extensa, en la que, entre otras cosas, le explica que con la reforma jubilatoria que el gobierno propone se van a tomar más años para hacer el cálculo: en vez de los 15 mejores años, se calculará con base en los mejores 20.
Sixto Amaro entrega una agenda de ONAJPU y una nota dirigida a Lacalle Pou, en la Torre Ejecutiva, en Montevideo.
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A algunos metros, todavía en la concentración, está Sixto Amaro, actual secretario general de la Onajpu. En diálogo con la diaria, explica que la necesidad del aumento de 3% es “recuperar el poder adquisitivo que se viene perdiendo desde hace tres años”. Esto lo ata con otra de las reivindicaciones de la marcha de hoy: “No a la violencia y maltrato al adulto mayor”. Amaro sostiene sobre este punto que “las jubilaciones [mínimas] de 17.223 pesos por mes son una agresión a un adulto mayor que trabajó 30 años y que hoy está pasando hambre. Esto es una agresión, una falta de respeto, de consideración, y de estos temas queremos hablar con el presidente de la República”.
Precisamente la reunión con el presidente Luis Lacalle Pou fue uno de los reclamos que se incluyó en la proclama que se leyó en el estrado apostado frente a la Torre Ejecutiva, en la plaza Independencia, donde confluyó una marcha de unas tres cuadras de extensión. Allí se habían colocado sillas para recibir a los participantes, aunque no alcanzaron. La oratoria fue precedida por el himno nacional, y varios puños se levantaron al entonar la frase “tiranos temblad”.
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“Hoy estamos por muchas cosas acá, pero, entre ellas, también reclamando ser recibidos por el presidente de la República, que hasta ahora ha sido el único que desde la reapertura democrática no ha recibido a la Onajpu”, afirmó el representante de los jubilados y pensionistas en el Banco de Previsión Social (BPS), Ariel Ferrari, cuando se subió al escenario. Ferrari señaló que se ha comprobado a través de las elecciones en ese organismo que la organización más representativa de los jubilados es la Onajpu y “por tanto reclamamos que nos den un lugar para conversar de las cosas que nos preocupan”, afirmó.
Los jubilados y pensionistas no pueden “esperar a recuperar el poder adquisitivo para el año 2025”
La oratoria central estuvo a cargo de la presidenta de la Onajpu, Estela Ovelar, quien comenzó recordando los efectos que dejó la pandemia, particularmente, entre los adultos mayores, lo cual ligó con las reivindicaciones concretas. “En muchos de nosotros todavía está el temor a salir, a las soledades, a las tristezas, a las ausencias, y todo esto se agudiza aún más cuando venimos sufriendo la pérdida de poder adquisitivo para satisfacer nuestras necesidades básicas, como el alimento, atendernos en salud y la vivienda”, expresó. En ese sentido, Ovelar hizo hincapié en la pérdida de poder de compra, de la que dijo que “no hay duda”.
“El ajuste de enero de este año, 2023, con el descuento de aquel adelanto que se nos había otorgado de 3%, siguió haciendo que hoy perdiéramos poder de compra, por lo tanto, calidad de vida. Nuestros jubilados y pensionistas de menores ingresos están pasando mal. Están enfrentando necesidades alimentarias y de atención en salud. Lo vemos cuando vamos al almacén; no precisamos ser ministros de Economía”, afirmó Ovelar, y consideró que los jubilados y pensionistas no pueden “esperar a recuperar el poder adquisitivo para el año 2025, porque nuestros tiempos son diferentes”. “Por lo tanto, reivindicamos el aumento de 3% a partir del mes de julio, no como adelanto que después sea descontado, sino como aumento”, enfatizó.
En esa línea, Baldassari recordó, en diálogo con la diaria, que “el ajuste que se había logrado extraordinario [en julio] para los que ganaban la jubilación mínima permitió triplicar la jubilación mínima en valores constantes respecto de cuando empezó esa política”, en años anteriores. Explicó que en gobiernos anteriores “no se descontaba a fin de año, sino que se incorporaba a la jubilación y en el ajuste de enero del año siguiente se incluía”. En cambio, “esta administración lo que hizo fue darlo como un adelanto a cuenta que luego se descontaba del ajuste de enero. Eso llevó a empezar a desmejorar la jubilación mínima en cuanto a su poder de compra”.
También estuvo en el discurso de Ovelar, interrumpido por aplausos en varias ocasiones, la reforma previsional que está próxima a aprobarse en Diputados. “La Onajpu no acompañó esta reforma previsional ya que no fue un diálogo de seguridad social. Y con toda esta demora en su tratamiento y modificaciones nos han dado la razón en que no existió un verdadero diálogo, que no era tan urgente su aprobación”, sostuvo Ovelar, e hizo énfasis en “la preocupación” de la organización frente a la creación de la agencia reguladora, “integrada por tres representantes denominados por el Poder Ejecutivo, donde no hay representación social ni de nuestros jubilados, trabajadores y empresarios”.
También Ferrari habló sobre la reforma, quien se preguntó “qué quedó de aquel proyecto” que se trabajó en la Comisión de Expertos en Seguridad Social, ya que el texto “hoy tiene más de 100 cambios”. “¿Qué nos decían? Que esto es un proyecto para nuestros hijos, para nuestros nietos, para el futuro. Y ahora el presidente nos dice: ‘Esto es como la leche, le echás agua pero sigue siendo leche’. Yo no quiero leche rebajada para mis hijos, no quiero leche rebajada para mis nietos”, aseveró Ferrari, que acto seguido afirmó que “es justo ese ejemplo que utiliza” el mandatario “porque no es leche, pero sí son rebajas de las jubilaciones”.
Ferrari aseguró además que según la rendición del BPS del año pasado esa institución precisó menos asistencia que en 2021, “pero fundamentan la reforma diciendo que el BPS iba a colapsar”. “Lo que es lamentable es por qué precisamos menos: se redujo el gasto porque cayeron las jubilaciones y las pensiones”, afirmó.
La plataforma de la Onajpu también incluyó la reivindicación del Sistema Nacional de Cuidados y del Plan Ibirapitá, “que no se ha considerado tampoco en este proyecto de reforma previsional”, destacó Ovelar. En ese sentido, la dirigente planteó que “el cuidado también es un derecho, como una función social” y un “asunto público que afecta a toda la sociedad”.
En cuanto al Plan Ibirapitá, Ovelar recordó que “ya no se entregan tablets, se entregan teléfonos inteligentes” y que “se ha bajado lo que cobra cada persona [el tope] para poder tener acceso”. “Esto es dejar de lado la inclusión digital de nuestros adultos mayores”, sentenció.
Conferencia y concentración de la Intersocial en el marco de la votación de la reforma jubilatoria
A las 10.00 del lunes 24 está convocado el plenario de la Cámara de Diputados para votar el proyecto de reforma jubilatoria, que deberá volver al Senado luego para que apruebe o rechace las modificaciones. En este contexto, la Intersocial convoca a una conferencia de prensa que tendrá lugar a las 12.00 en la sede del PIT-CNT, con motivo de “explicar el repudio” del conglomerado de organizaciones sociales, explicó a la diaria el secretario general de la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (Fucvam), Gustavo González.
Asimismo, entre las 16.00 y las 17.00 la Intersocial organizará una concentración fuera del Palacio Legislativo para expresar el rechazo al proyecto, mientras se desarrolla la votación. González se refirió a los múltiples cambios que tuvo el proyecto en las últimas semanas, algunos a iniciativa de Cabildo Abierto y otros que nacieron del Partido Colorado, y al respecto afirmó que “es una verguenza, no se sabe el Frankenstein que van a votar al final”. “La ciudadanía ha escuchado en particular de varios representantes oficialistas y de [Rodolfo] Saldain, quien estructuró la ley, que estaba todo armado, todo extraordinario, y de un día para el otro vino el general y mandó a cambiar”, sostuvo, con referencia al líder cabildante y excomandante en jefe del Ejército Guido Manini Ríos.
“Ahí parecía que se acomodaba la cuestión”, continuó González, “y aparecen los colorados con nuevas modificaciones”, recordó, y cuestionó la metáfora que hizo Lacalle Pou sobre los cambios a la iniciativa: “En mi barrio cuando el lechero cortaba la leche con agua estaba muy mal visto”, lanzó.