El titular del Ministerio de Defensa Nacional (MDN), Javier García, informó el lunes que el gobierno resolvió comprar dos buques Offshore Patrol Vessel (OPV) a un astillero español para mejorar la capacidad de vigilancia de la Armada Nacional. En total, ambos barcos le costarán al Estado uruguayo 82,2 millones de euros y, “si todo marcha según los plazos”, atracarán en el puerto de Montevideo durante 2025.
En una conferencia de prensa, García señaló que la adquisición contó con el aval de “la comisión asesora que designó el MDN” y con “el asesoramiento de la Armada Nacional”. La compra naval, que deberá ser analizada por el Tribunal de Cuentas, se efectuará al astillero español Cardama Shipyard. En su página web, la empresa dice tener “una larga experiencia en la construcción y reparación de buques” y haber entregado exitosamente buques en Reino Unido, Islandia, Argelia, Benín, Angola, Marruecos, Irak, Ecuador y Venezuela, entre otros países.
García dijo que el gobierno eligió la oferta de Cardama Shipyard por el plazo de entrega, el costo total y el cumplimiento de los requisitos técnicos. Comentó que la comisión asesora del MDN recibió ocho ofertas de diferentes empresas especializadas.
Consultado sobre de dónde saldrán los 82,2 millones de euros para la compra de ambos barcos, el ministro señaló que en la Rendición de Cuentas se incluyó una suma de 40 millones de dólares, “que fueron depositados el año pasado”, y el resto del dinero provendrá de “refuerzos de Rentas Generales”.
“Estos buques van a permitir a la Armada Nacional su misión esencial, consistente en la custodia de nuestra soberanía nacional en el mar, el cuidado de nuestros recursos naturales, y evitar y reprimir cuando sea necesario actividades ilegales, [tales como] la pesca ilegal o el crimen organizado”, manifestó García.
Una vez en aguas uruguayas, los buques OPV permitirán “retomar el control de nuestro espacio marítimo, cuestión que está muy limitada a partir del deterioro y la antigüedad que tienen los buques de la Armada Nacional en el día de hoy”, afirmó García. En promedio, las embarcaciones tienen alrededor de “60 años de antigüedad”, lo cual además “insume altísimos costos de mantenimiento”, señaló.
El comandante en jefe de la Armada Nacional, el almirante Jorge Wilson, añadió que se trata de buques de “diseño simple”. Sentado a la derecha de García, dijo que para su eventual mantenimiento “hay representación en plaza”, a diferencia de los barcos que actualmente dispone la Armada Nacional, cuyos representantes “han cerrado”.
Según la descripción de Wilson, los buques OPV que comprará el gobierno tienen capacidad para alojar “hasta 80 individuos”, mientras que está previsto “entre 50 y 60 tripulantes para la operación de la plataforma”. Destacó que estas naves permiten “la posibilidad de emplear el helicóptero embarcado”, lo que “amplía su radio de detección”, y además traen incorporada una “rampa” para “lanzar lanchas de intercepción rápida”. La velocidad máxima de cada buque OPV, añadió, es de 24 nudos, unos 45 kilómetros por hora aproximadamente.
El antecedente
En diciembre de 2021, el MDN intentó un llamado a ofertas para la adquisición de dos patrullas oceánicas OPV para la Armada Nacional. En aquel entonces, hubo ofertas de empresas de China, Países Bajos y Francia. Según trascendió, la oferta china había quedado en primer lugar tras la evaluación técnica de la comisión asesora, pero tenía un costo total de 160 millones de dólares, que según el MDN excedía el presupuesto del ministerio. Asimismo, según consignó el portal especializado en temas militares Infodefensa, a esto se sumaron presiones desde Estados Unidos para no adquirir buques chinos.
Consultado el lunes por los aspectos geopolíticos, García aseguró que la compra de los buques españoles “se fundamentó en razones técnicas, de monto y de plazo”. Valoró que el costo total es “sensiblemente inferior al primer llamado que hizo el MDN”, en referencia a la opción de la empresa china. En ese momento, “nosotros dijimos que era un precio que excedía sensiblemente las posibilidades que manejaba Uruguay desde el punto de vista presupuestal”, recordó.
En cuanto al plazo de entrega, el titular del MDN afirmó que, “si todo marcha según los plazos”, el primero de los dos buques atracaría “en el primer semestre de 2025”, en tanto, el otro llegaría “al final del año 2025”.
Por último, García mencionó que, aparte de los dos buques OPV, la Armada Nacional recibirá uno “donado” por el gobierno de Corea del Sur; también señaló que ya están operativos tres buques “clase Protector” que vinieron en octubre del año pasado desde Estados Unidos. Así, entonces, “estamos frente a la mayor renovación de las capacidades de buque de la Armada Nacional en muchísimo tiempo”, aseguró.