Si bien las distintas autoridades de la educación del actual gobierno han destacado una y otra vez la coordinación y el buen vínculo institucional entre los principales organismos con competencia en la temática, para algunas autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) esta semana se dio un hecho que alteró la armonía. El Ministerio de Educación y Cultura (MEC) archivó el pedido de reconocimiento universitario de las carreras del Consejo de Formación en Educación (CFE), en una resolución con un tono particularmente duro con el accionar del consejo.
El desencuentro entre el CFE y el MEC redujo drásticamente las chances de que las carreras públicas de formación docente –que nuclean a casi la totalidad de la matrícula nacional– puedan acceder al reconocimiento universitario en el actual período de gobierno. Se trata de una de las principales políticas educativas de la coalición multicolor, que en el corto plazo sólo podrá alcanzar a algunas instituciones privadas que se presentaron para obtener el reconocimiento, como el colegio Elbio Fernández y la Universidad de Montevideo, según informó Búsqueda.
La medida y el tono de la resolución firmada por el ministro Pablo da Silveira generaron reacciones inmediatas en los actores más críticos de la transformación curricular, que, justamente, en el CFE se fundamentó por las autoridades en la necesidad de cumplir con los requisitos del mecanismo del MEC.
El Sindicato de Docentes de Formación en Educación (Sidfe) se expresó a través de un comunicado, en el que señala que desde el inicio del proceso advirtieron que la Transformación Educativa de la ANEP “era un Titanic que se iba a hundir tarde o temprano, al no haber buscado la participación, elaboración y compromiso de los directamente involucrados”.
Además de recordar varios temas denunciados por el Sidfe en su momento, como el plagio en un documento curricular y el pasaje a un sistema de elección de horas que consideran inadecuado, concluyen que la resolución del MEC “pone en evidencia el fracaso de la transformación curricular y su alejamiento de la formación universitaria”.
En suma, apuntan contra las autoridades del oficialismo y en particular al expresidente del Codicen Robert Silva, de quien afirman que, como “capitán” del barco, “se fue a hacer campaña electoral”. Por su parte, en el marco del año electoral reclaman a los candidatos que se pronuncien o no sobre la continuidad de la actual política de formación docente y reafirman que “la formación de docentes y educadores necesita convertirse en universitaria” a través “de una universidad pública autónoma y cogobernada” y no “de títulos de cartón”.
La consejería docente del CFE, actualmente encabezada por Nirian Carbajal, también emitió un comunicado en el que aseguran que la resolución del MEC “presenta a la conducción política del CFE en términos muy despectivos”. De todas formas, manifiestan que no están sorprendidos por su contenido, ya que las afirmaciones que realiza son “confirmatorias” del análisis crítico que venían efectuando.
Además de lamentar que los cambios curriculares no tuvieron en cuenta la opinión de los principales órganos y actores institucionales, desde la consejería docente se apunta también contra el mecanismo definido por el MEC para dotar de carácter universitario la formación de educadores, que deben dar una prueba una vez que la institución logre el reconocimiento. Según afirman, dicha política genera “una competencia brutal y descarnada entre educadores y entre estudiantes, unos por el acceso a una titulación universitaria y otros por la obtención de becas que les permitan culminar sus trayectorias de formación”.
En el mismo sentido, afirman que la política del CFE, ubicado dentro del ente autónomo ANEP, no debe quedar supeditada a “los vaivenes políticos” y a lo que disponga el MEC. Al igual que el Sidfe, reclaman una universidad de la educación autónoma y cogobernada para generar una verdadera “política de Estado”. En esa línea, se afirma que “no es posible que se alcance el reconocimiento universitario por decretos que se laudan en los ámbitos ejecutivos, sin educadores y sin estudiantes”.
El FA analiza llamado a comisión
En diálogo con la diaria, el senador del Frente Amplio (FA) Sebastián Sabini tampoco se mostró sorprendido por la resolución y consideró que este desenlace demuestra el “fracaso” del gobierno y en particular de la gestión de Da Silveira. El legislador reafirmó que el definido por el MEC se trata de un mecanismo “inútil” y difícil de llevar a la práctica, por lo que los hechos le terminaron dando la razón.
Además, Sabini mostró preocupación por todos los recursos que el MEC y el CFE vienen destinando a este proceso, al que definió como “sumamente desprolijo”. En otro plano, consideró que “hay una contradicción muy grande” entre la resolución que tomó esta semana el MEC y la convocatoria a dar una prueba para acceder al título universitario que el organismo realizó a docentes ya recibidos, que se dio el año pasado.
De todas formas, el senador sí mostró su sorpresa por el tono de la resolución, que “se parece más a una declaración de guerra”, y la leyó como “una acusación de que no había voluntad para llevar adelante el proceso de parte del CFE”. Por todo ello, la bancada de legisladores del FA analizará el lunes el llamado a comisión a Da Silveira, de forma que pueda explicar lo que está ocurriendo.
Desde el gobierno, por su parte, buscan separar la resolución del MEC del proceso de transformación curricular, como el propio Víctor Pizzichillo, presidente del CFE, manifestó este viernes en una jornada académica que tuvo lugar en los distintos centros de formación docente del país. En esa instancia, además, el jerarca aseguró que el organismo trabaja en un informe jurídico con la idea de pedir el desarchivo del pedido de reconocimiento universitario de tres de sus carreras y retomar la solicitud.
Según dijo una fuente del Poder Ejecutivo a la diaria, se generó un “desgaste” entre Pizzichillo y el área del MEC que recibe las solicitudes, ya que le pidieron reiteradamente la misma información. La fuente descartó de plano que lo resuelto implique un juicio sobre la calidad formativa de las carreras del CFE. Justamente, a lo que apuntó el MEC fue a dejar claro que no había información suficiente para que el tema pase al consejo consultivo que se encarga de valorar académicamente las solicitudes.
Desde el gobierno le restaron importancia a lo sucedido y afirman que este tipo de dificultades para presentar la información son comunes cuando se trata de instituciones que no están habituadas a estos procedimientos, como es el caso de la ANEP. En ese sentido, la fuente señaló que la documentación era “muy incompleta” en varios de los ítems a presentar, como la formación de los docentes del organismo. Al respecto, como el CFE tiene múltiples institutos en todo el país con niveles académicos dispares, el reconocimiento universitario se analizará por regiones y no a nivel nacional, ni tampoco instituto por instituto. Según apuntó, ello generó algunas dificultades para sistematizar los datos de formación de los profesores.
De todas formas, la fuente aseguró que la decisión de archivo es “totalmente reversible” si la ANEP lo solicita.