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Daniel Radío (archivo, julio de 2020).

Foto: Federico Gutiérrez

Tras críticas a Radío, el Partido Independiente lo respaldó y cuestionó “actitud de censura” de socios de la coalición

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Diputados oficialistas apuntaron contra el secretario nacional de Drogas por sus reparos al proyecto de ley de internación compulsiva para adictos, y pretenden convocarlo al Parlamento.

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Leído por Abril Mederos.
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El Partido Independiente (PI) respaldó al secretario general de la Secretaría Nacional de Drogas (SND), Daniel Radío, luego de que varios diputados oficialistas manifestaran que “no está a la altura del cargo” y que “no tiene respaldo político”. Además de expresar discrepancias con iniciativas vinculadas al cannabis, los socios de la coalición de gobierno criticaron a Radío por haber dicho que está en contra del proyecto de ley de internación compulsiva para personas con uso problemático de drogas.

En una entrevista que brindó al diario El Observador la semana pasada, Radío dijo que el proyecto de internación compulsiva ya aprobado en la cámara baja “no resuelve ningún problema y, además, es perjudicial”. Varios legisladores de la coalición interpretan que la opinión de Radío no corresponde y propusieron convocarlo al Parlamento para, además de achacarle su comentario, cuestionar las políticas que lleva adelante su secretaría, que entienden hace una continuidad de las administraciones frenteamplistas.

En declaraciones al diario El País, el diputado de Cabildo Abierto (CA) Martín Sodano dijo que Radío “no está a la altura del cargo”. “Debería hablar con su líder político [Pablo Mieres] y pedirle un cargo en otro lado. Si yo fuera él, doy un paso al costado, porque no está dando la talla”, apuntó. A su vez, otra diputada cabildante, Nazmi Camargo, dijo estar “bastante decepcionada con la gestión de Radío”, y agregó que “no tiene respaldo político”. Conceptos similares esgrimieron otros diputados del PN y del PC.

“Este proyecto de ley no tiene efectividad”

la diaria intentó contactarse con el secretario general de la SND, pero no obtuvo respuesta. Consultado por la diaria, el ministro de Trabajo y Seguridad Social y líder del PI, Pablo Mieres, se limitó a decir que Radío “cuenta con el total respaldo” de él y de su colectividad política.

A su vez, el único diputado del partido, Iván Posada, manifestó que la opinión del jerarca sobre el proyecto de ley que ahora será discutido en la Cámara de Senadores es “la opinión del PI”. El legislador recordó que su fuerza política no votó a favor del proyecto porque entiende que “es inconveniente”.

Según dijo, para tomar esa definición se basaron en las explicaciones que dieron en la comisión que estudiaba el proyecto “las personas que están especializadas en estos temas”, o sea, “cátedras” que “hicieron un largo fundamento sobre por qué planteos como el que recoge este proyecto de ley no tienen efectividad”. “Todas las opiniones son coincidentes en la inconveniencia de este proyecto que ha sido llevado adelante por algunos sectores de la coalición pero que claramente no cuenta con un apoyo desde el punto de vista científico”, dijo Posada, y expresó: “El proyecto busca dar soluciones a un grave problema, pero equivoca el camino”.

Con respecto a las críticas de legisladores oficialistas a Radío por expresarse públicamente sobre el proyecto, el diputado manifestó que “lo que se está haciendo es una actitud de censura”, pero no sólo hacia el integrante del Poder Ejecutivo, sino a “todo un partido que opina distinto de lo que opinan otros partidos integrantes de la coalición”. Además, expresó que “dentro de la coalición” hubo otros diputados que plantearon reparos al proyecto, aunque finalmente dieron su voto. “Me consta que hubo diputados del PN que votaron algún artículo pero que expresaron su opinión negativa respecto de otros”, señaló.

En cuanto a las críticas a Radío por su gestión al frente de las políticas de drogas, Posada dijo que el jerarca “está allí designado por el presidente de la República”, y aseguró que la misión “implica el cumplimiento de las leyes vigentes”, entre ellas el control y regulación del mercado de cannabis. Igualmente, el legislador dijo que existe “un consenso general” acerca de que “de parte del Estado” hay “ausencia en cuanto a dar respuesta a los tratamientos en materia de adicciones”; pero que este “es un tema pendiente desde hace mucho tiempo y necesariamente deberían instrumentarse cambios en la política de salud” para abordarlo, lo que “no le corresponde” únicamente a la Junta Nacional de Drogas [JND]”.

También se expresó, a través de Twitter, la directora del Instituto Nacional de Mujeres, Mónica Bottero, quien también es dirigente del PI. Dijo que “los problemas complejos tienen soluciones complejas y muchas veces no son para la tribuna más ruidosa”.

En tanto, el director del Servicio de Comunicación Audiovisual Nacional, Gerardo Sotelo, escribió que “el mundo vio fracasar muchas políticas públicas, pero ninguna de modo tan rotundo como la presunta política ‘antidrogas’ con aumento exponencial de producción, adulteración, consumo y adictos”, y agregó que “insistir sería irracional y tendría los mismos penosos resultados”.

También el director nacional de Empleo, Daniel Pérez, expresó que “un problema complejo como es el de las drogas requiere de una mirada moderna, compleja, responsable e inteligente como la que tiene Daniel Radío”. Agregó que “no es un camino fácil ni de resultados inmediatos, pero es el camino que Uruguay debe transitar”.

“Promoción del mercado cannábico”

Sodano de CA dijo a la diaria que “lo que se está evaluando es un llamado” a Radío a la comisión especial de Adicciones de la Cámara de Diputados, aunque “también hay otra propuesta”, que implica hacer una reunión “mano a mano” entre el jerarca y algunos legisladores. No obstante, opinó que la citación debería ser al ámbito institucional.

“Hoy no hay un balance de cuáles son los objetivos y las metas que se propuso la JND y qué fue lo que se hizo. Si revisamos todas las comunicaciones que ha hecho Radío en nombre de la JND, lo que encontramos es promoción del mercado cannábico, pero trabajo en la prevención, abordaje, rehabilitación, atención y demás, no hay”, dijo el diputado cabildante.

Consultado acerca de si su partido pedirá la destitución de Radío, el legislador dijo que “va a depender de la información” que se aporte en la reunión. Igualmente, admitió que “hay legisladores tanto del PN como del PC” que han dicho “estar en contra de este tipo de políticas que se están llevando adelante”.

“Una continuidad” de las políticas del FA

Diego Olivera, quien durante el último tramo del gobierno frenteamplista ocupó el cargo que hoy tiene Radío, opinó en diálogo con la diaria que hay una “orientación general sobre las políticas de drogas” que “en buena medida implica una continuidad con muchas de las cosas” que se hicieron durante su período. Olivera dijo que “hay una concepción general de cuál es el papel que tiene que jugar el Estado con respecto a la política de drogas que es compartida”, que apunta principalmente a “criticar el prohibicionismo” y “buscar alternativas”.

“Esas alternativas tienen como mascarón de proa la regulación del mercado de cannabis y su evaluación para ver cómo se sigue adelante”, indicó Olivera, que luego apuntó que “hay cosas que pueden ser mejoradas, como el tema del acceso a los turistas” o “de las variedades que están disponibles para la venta”, iniciativas en las que Radío pretende avanzar.

Olivera consideró que Radío es “una figura muy positiva”, que “cumple una función muy importante de liderazgo en las políticas de drogas”. Igualmente, cuestionó que la agenda de la SND parece haber estado “centrada en la cuestión del cannabis”, quizás incluso “en detrimento de otras líneas de trabajo”. No obstante, dijo que “quizás se está trabajando y no se ve lo suficiente”, o tal vez “no se cuenta con los recursos necesarios”.

En cuanto al proyecto de ley en discusión, Olivera manifestó que es “negativo” en tanto “no prevé que se pueda mejorar la situación de las personas que tienen uso problemático de drogas”, ya que “nada dice sobre las formas de atención”.

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