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Marcelo Abdala (c), el 25 de octubre, durante la conferencia de prensa del Secretariado Ejecutivo del PIT CNT, en la sede sindical, en Montevideo.

Foto: Alessandro Maradei

PIT-CNT anunció su “oposición contundente” a la reforma previsional por la afectación de los futuros jubilados

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La central sindical estima que “los trabajadores deberán postergar su retiro” cinco años y “en muchos casos” tendrán pasividades “sensiblemente inferiores”, con bajas de hasta 8.000 pesos en salarios medios.

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Leído por Mathías Buela.
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El presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala, acompañado por otros dirigentes sindicales, oficializó este martes el rechazo de la central de trabajadores al proyecto de ley de reforma de la seguridad social presentado por el Poder Ejecutivo. En una conferencia de prensa en la sede del PIT-CNT, anunció que propondrán una movilización con paro parcial para el 16 de noviembre.

“El presidente [Luis Lacalle Pou] le mintió a la población cuando dijo que no iba a subir la edad de jubilarse de los trabajadores. No está bueno que antes de una campaña electoral se hable en este tono y que luego se haga todo lo contrario”, señaló el líder sindical. Esto porque el proyecto del gobierno eleva a 65 años la edad mínima para jubilarse, y si bien se propone un esquema gradual que sube el límite a 63 años para los nacidos en 1973, existen “errores de diseño”, según la visión de los técnicos de la central obrera, que traerán problemas a futuro.

Un documento de análisis de la reforma, al que accedió la diaria, desarrolla varios motivos por los que el PIT-CNT se opone al proyecto. Establece, por un lado, que el cambio de condiciones en la edad de retiro entre los nacidos en 1972 y 1973 “resulta muy drástica entre trabajadores que pueden haber nacido con sólo algunos días o meses de diferencia”.

Algo similar ocurre con la nueva fecha de vigencia del nuevo esquema de cálculo jubilatorio, que tras una negociación a la interna de la coalición se postergó cinco años y comenzará en 2033. “Con la nueva regla de proporcionalidad planteada para la transición entre el régimen actual y el propuesto, mientras las personas con causal jubilatoria anterior al 31 de diciembre de 2032 podrán retirarse bajo las reglas del régimen vigente, quienes alcancen la causal sólo unos meses más tarde” deberán en parte hacerlo por las reglas antiguas y en parte por las nuevas. “Esto provocará cambios relevantes en los montos jubilatorios de personas con trayectorias salariales iguales y edades muy similares”, indica el análisis del PIT-CNT.

Por esto, se advierte “un serio problema de diseño en los cambios propuestos, que no contemplan el gradualismo necesario entre personas nacidas con días o meses de diferencia” y, por ende, “se vuelven a generar las condiciones para que aparezcan problemas similares a lo ocurrido con los ‘cincuentones’”, en referencia a la generación de trabajadores afectados en su jubilación por la reforma de 1996, que tuvieron una ley reparatoria en 2018.

“Rebaja las jubilaciones”

La iniciativa “aumenta la edad de jubilarse, por tanto los años de trabajo, y lo peor de todo es que rebaja las jubilaciones”, sentenció Abdala acerca de los resultados de la reforma.

En el documento interno, a través de números y simulaciones, se refuta “la idea” que expuso el gobierno sobre que “las personas deberán jubilarse más tarde, pero no se retirarán con una jubilación menor a la que acceden hoy a edades más tempranas”. Según la argumentación de los técnicos del PIT-CNT, no se toma en cuenta que el suplemento solidario -un esquema de subsidio que incorpora la reforma- por su forma de ajuste anual “se va licuando en el tiempo” y para 2043 “abarcará a menos gente y por montos sensiblemente menores”.

En agregado, el gobierno no considera -a la vista de la central sindical- los cambios en el período considerado para el cálculo jubilatorio: “Pasará a calcularse en base a los mejores 25 años (hoy son los mejores 20 años) y se elimina la bonificación vigente de hasta 5% asociada a los últimos diez años de carrera laboral”.

Con estas consideraciones, hacia 2043, con la reforma plenamente en vigencia, “alguien que bajo el régimen actual a los 60 años se jubila con 36.000 pesos, con la reforma propuesta se jubilará cinco años más tarde con 28.000 pesos, es decir 8.000 pesos menos”.

“Es solamente una reforma jubilatoria” porque “no toca la financiación”

En la exposición el presidente del PIT-CNT señaló también que el proyecto incluye “una cosa absolutamente peligrosa: aumenta la discrecionalidad del Poder Ejecutivo”. Esto, según detalló, porque “hay alrededor de 51 artículos del proyecto que le dejan al Poder Ejecutivo decidir por sí y ante sí, cuando los buenos principios implicarían la participación social, como por ejemplo tenemos hoy en el BPS [Banco de Previsión Social]”.

En agregado, evaluó que el proyecto que presentó el gobierno y se comenzará a analizar en el Parlamento “no es de la seguridad social, es solamente una reforma jubilatoria, porque es lo único que toca”. Abdala dijo que la voluntad de introducir cambios en el sistema “se inicia en función de una necesidad de abatir determinados déficit en la seguridad social” y, pese a esto “lamentablemente es un proyecto de ley que no toca absolutamente nada que tenga que ver con la financiación”.

En ese sentido, cuestionó que “cuando vemos que crece la pobreza, que se rebaja el salario”, el proyecto “no toca nada a la gran riqueza del país”, y mencionó que se mantiene que “el trabajador aporta 15% para la seguridad social y el patrón 7,5%”. “No es serio hablar de un supuesto déficit y no tocar en nada la financiación”, insistió.

Sobre los pasos a seguir, el dirigente señaló que pedirán que en el Parlamento se generen “las condiciones que no generó el Poder Ejecutivo, esto es apuntar a un diálogo social y a una negociación para ir a un cambio estratégico en la seguridad social”, porque “otra reforma de la seguridad social intensa en derechos, financiada, solvente, universal y solidaria es posible y necesaria”.

Además, informó que para manifestar la “oposición contundente” al proyecto, el PIT-CNT participará “con todas sus fuerzas” en la movilización que hará el jueves la Intersocial desde las 18.30. En agregado, en la Mesa Representativa de la central se evaluará una “gran movilización de masas en torno al 16 de noviembre, con paro parcial en Montevideo y el área metropolitana”.

“Por qué no jubilarse antes”

En la conferencia de prensa, Abdala fue consultado acerca del argumento esgrimido por el gobierno de que la suba de la edad de retiro es una tendencia mundial. En su respuesta, sostuvo que “la revolución tecnológica en curso va a tender a disminuir el tiempo necesario para la provisión de bienes y servicios”, por lo tanto, “el movimiento obrero” debería “levantar la bandera” para la reducción de la jornada de trabajo y, “por qué no, [para] jubilarse antes”. Señaló que si se quiere estimular que un trabajador trabaje más, se puede hacer desde el punto de vista económico, pero no estableciendo obligaciones.

540.000 trabajadores ganan menos de 25.000 pesos, hay condiciones de trabajo que son penosas y se eleva la edad para jubilarse. Es una propuesta contraria a la población trabajadora”, aseguró Abdala. Concluyó que para la central la reforma de seguridad social debería contemplar que “el que tiene más pague más”, pero que el “desafío” primario es que “esta reforma tan perjudicial no salga”.

“Se mantienen privilegios” en la caja militar

El análisis del PIT-CNT apuntó también a la situación de la caja militar y la falta de acciones de peso para reformar el subsistema. “Es por lejos el más deficitario e inequitativo de todos [los regímenes previsionales]. Sin embargo, el cambio planteado permitirá que los militares continúen retirándose a edades bajísimas y en algunos casos con el doble del salario, durante los próximos diez años”, indicó la central sindical. Agregó que “se mantienen privilegios injustificables” y que los militares deberían tener “cambios mucho más profundos e inmediatos” que “el régimen general” al que aportan el resto de los trabajadores. “Una reforma verdaderamente justa” debería incluir “un impuesto a las altas jubilaciones militares que se han venido otorgando durante décadas en condiciones de privilegio”, concluyó el PIT-CNT.

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