Con la presencia del presidente, Luis Lacalle Pou, la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) inaugurará este lunes el Hospital del Cerro. El centro de salud, promesa de campaña de este gobierno, es una inversión de tres millones de dólares que consiste en más de 2.000 metros cuadrados, internación quirúrgica y médica, dos quirófanos y “todos los servicios que un hospital de segundo nivel requiere”, según informó ASSE. El centro de salud comenzó a funcionar hace varios días en el marco de un período de prueba.
La inauguración, que se da luego de un fin de semana ajetreado para el gobierno nacional, inmerso en una crisis política que terminó con el cese de dos ministros y dos subsecretarios, se retrasó varios meses, ya que en un principio estaba prevista para agosto. En 2022, cuando el titular de la institución pública, Leonardo Cipriani, recorrió las obras y adelantó la primera fecha de apertura, también mencionó que se trataría de “un edificio inteligente”, ya que tendría “todo un cableado de fibra óptica por dentro, que va a permitir que, por ejemplo, podamos tener un mamógrafo móvil en la zona trabajando, y va a estar pasando información al centro”. Según Cipriani, el hospital tendrá un perfil “quirúrgico”, se ubicará en un “punto estratégico” y ayudará a descongestionar otros hospitales públicos, como el Maciel.
Este hospital está en la agenda de Cipriani desde el primer año de gestión, con el argumento de que la zona necesitaba contar con una estructura de buen nivel. Sin embargo, el proceso no estuvo exento de polémica: por ejemplo, en 2022, el grupo Usuarios de la Salud del Oeste manifestó que antes de avanzar en un nuevo hospital era necesario destinar más recursos para la atención actual de los vecinos de la zona en los centros ya existentes.
En aquel momento, el Sindicato Médico del Uruguay coincidió con el planteo de los usuarios, en el sentido de que un nuevo hospital no era prioridad, por la cercanía de centros como el Pereira Rossell y el Maciel y la necesidad de reforzar las policlínicas de la zona, desde la infraestructura y los recursos humanos, para no tener que trasladar a los pacientes.
La obra avanzó pero hasta hace pocos meses no todas las áreas de atención estaban aseguradas y, de hecho, dentro de lo quirúrgico –la especialidad que se le asignó al centro– faltaban anestesistas. En un principio, ASSE abrió llamados a los que ningún especialista se presentó y por eso tomó la decisión de contratar a profesionales argentinos para el Hospital del Cerro, algo que generó malestar en la Sociedad de Anestesiología del Uruguay. Finalmente, el prestador decidió abrir un nuevo llamado con la finalidad de contratar a 19 anestesistas: 14 grado 2 y cinco grado 3.