Ante la negativa del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de aceptar un fondo no reembolsable de parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para la Intendencia de Montevideo con el fin de mitigar las consecuencias de la crisis hídrica, la vicepresidenta del Frente Amplio (FA), Verónica Piñeiro, calificó el accionar de “mezquindad” e “inoperancia” por parte de la administración de Luis Lacalle Pou.
En una rueda de prensa, este miércoles, sostuvo que no entienden la respuesta de la ministra de Economía, Azucena Arbeleche, porque “en los momentos de crisis, las ayudas y aportes deberían ser todos tomados en cuenta”. “Es una donación para seguir brindando agua a las familias de Montevideo. Esto habla de cómo los gobiernos [departamentales] del FA están desarrollando acciones y están yendo a abordar a las personas que sufren la crisis del agua”, expresó.
Este martes, en una nota dirigida a la intendenta capitalina, Carolina Cosse, Arbeleche recordó que el Poder Ejecutivo decretó la emergencia hídrica en la zona metropolitana del país para “brindar seguridad jurídica y dar agilidad a los procedimientos administrativos necesarios para afrontar la referida situación de excepción”.
En ese marco, indicó que a través del Ministerio de Desarrollo Social y del Ministerio de Salud Pública se “están coordinando todas las acciones necesarias para asistir a la población”, especialmente a los más “vulnerables, tanto por razones económicas como de salud”, y concluyó que “de considerarse necesario, se podrá recurrir al apoyo de organismos multilaterales de crédito ante los cuales este ministerio ejerce la representación del país”.
Al respecto, la presidencia del FA calificó esta decisión de “un error más” del gobierno nacional, “que sigue sin dimensionar el efecto que esta crisis tiene en la gente”. “¿Vamos a esperar que se haga cargo tarde y mal como ha hecho hasta ahora con esta crisis que nos tiene sin agua potable?”, se preguntaron en la declaración. En ese marco, dijo que comparten la “indignación” de Cosse porque “esto es un nuevo ataque a la gestión” de la comuna capitalina. “La IM ha desplegado múltiples acciones desde hace semanas para proteger a las familias más vulnerables y brindar información clara para que las personas puedan tomar decisiones frente a la crisis. Pero nada es suficiente cuando del otro lado hay actitudes inexplicables”, se quejaron.
Según entienden, esta donación del BID “se negoció” el pasado 25 de mayo cuando el gobierno “nos decía que iba a garantizar la calidad del agua, que iba a traer una planta desalinizadora en un avión, compromisos que una vez más no pudo cumplir”.
En ese sentido, desde el FA apuntaron que el Poder Ejecutivo “sigue sin asumir la gravedad” de la crisis hídrica que atraviesa el país y que “los problemas de coordinación en la implementación de acciones y políticas públicas responden a la decisión del gobierno nacional de no convocar al Sinae [Sistema Nacional de Emergencias], ámbito que permitiría a las intendencias departamentales coordinar las respuestas a la crisis”.
En análisis
Desde las 9.00, técnicos, representantes del FA en el gobierno, legisladores y expertos están reunidos para monitorear la crisis del agua. Según comentó Piñeiro, que es quien coordina estas reuniones, están “intercambiando y recibiendo información” desde el directorio de OSE, que se reúne esta mañana para evaluar nuevas medidas e intendencias departamentales “para seguir analizando la crisis”.
Para Piñeiro, la falta de agua “se va profundizando día a día”, por lo que la declaración de emergencia hídrica en la zona metropolitana “llega tarde”. “Venimos hace meses alertando sobre esta situación y la necesidad de avanzar en un análisis profundo de la crisis y también en el desarrollo de medidas y acciones que lleguen de manera oportuna para atender esta situación”, consideró.
La vicepresidenta del FA recordó que el gobierno declaró en setiembre del año pasado la emergencia agropecuaria “y eso no se trasladó a una situación de crisis hídrica que también afecta otros usos del agua, como es brindar el agua potable para más de la mitad de la población”.
Según Piñeiro, el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, no cumplió con su palabra al asegurar, a mediados de mayo, que se iba a brindar agua de la misma calidad que en ese entonces, porque los estudios que empezó a publicar diariamente el gobierno demuestran lo contrario. “Eso fue bastante irresponsable porque al día de hoy vemos que esa calidad no se pudo asegurar”, consideró.
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Con relación a las medidas anunciadas este lunes por parte de Presidencia, la oposición entiende que varias de ellas ya habían sido anunciadas por las bancadas parlamentarias y que, en su momento, esto no se aprobó. A modo de ejemplo, Piñeiro citó la exención de impuestos al agua embotellada para poder bajar su costo, una medida que finalmente se someterá a votación en esta jornada en el Parlamento.
En síntesis, si bien valora las medidas, el FA plantea que de todas maneras “se debe revisar la tarifa porque las personas están recibiendo agua que no es de calidad”. “Hay que atender a las personas y cómo las familias están sufriendo un aumento del gasto porque tienen que adquirir agua embotellada”, concluyó Piñeiro.