-Tu más reciente trabajo discográfico es un homenaje a Bezerra da Silva, a quien ya habías tributado junto a otros grandes artistas de tu país y con quien además grabaste. Contales a los uruguayos quién fue Bezerra da Silva.

-Fue uno de los mayores sambistas de las historia de Brasil. Fue un gran amigo y uno de los responsables de que yo empezase a mezclar samba con rap. Retrató la realidad de las favelas y su problemática con letras más que interesantes, siendo muy popular en las décadas del 70 y 80. Tiene muchos hits y músicas conocidas por todos. Para mí fue una influencia muy grande. Fue al primero que mostré la mezcla del rap con el samba y quien me mostró que allí había un camino para mi. Me ayudó mucho a descubrir mi propia música.

-Si tuvieras que agregar más nombres a esa lista de sambistas que te influenciaron, ¿quiénes estarían?

-Zeca Pagodinho, Fundo do Quintal, Arlindo Cruz… el samba para mí fue muy importante porque me ayudó a encontrar el camino.

-El samba tiene un entorno bien particular, más aun si lo vinculamos a Bezerra y sus canciones, ¿tenés alguna anécdota que lo refleje?

-No es una anécdota divertida, pero el día del velorio de Bezerra llegué muy triste a las diez de la mañana, y allí estaba Zeca Pagodinho, sentado en una mesa al borde del féretro bebiendo una cerveza. Al verme me dijo: “Venga para acá, Marcelo, agárrese un vaso, que en el entierro de un sambista no hay llanto ni tristeza, sólo alegría”. Al rato fue llegando más gente -entre los que había varios sambistas-, y todos terminamos a las carcajadas contando anécdotas e historias de Bezerra, con los codos apoyados en el cajón y bebiendo cerveza. Con tristeza sí, pero conmemorando.

-Después de seis discos solistas, en los que incluyo el Acústico MTV y el último Marcelo D2 canta Bezerra da Silva, ¿podríamos decir que encontraste “la batida perfecta”?

-Pienso que lo que importa no es “la batida perfecta” sino la búsqueda; la esencia está en procurarla. Hay mucho camino por recorrer y no pienso mucho en eso, sí en la música, pero no en qué es lo que vendrá. Igualmente, la mezcla de rap y música brasileña tiene un largo camino a seguir.

-Aunque tu disco más nuevo es netamente de samba, ¿esto es circunstancial o tu música seguirá dentro del hip hop?

-El disco de homenaje a Bezerra fue un proyecto muy especial, no me voy a convertir en sambista por ello, voy a continuar mi búsqueda de la batida perfecta, ¡el arte del barullo! Posiblemente, el año que viene me mude un par de años para Los Angeles para hacer un disco nuevo allí, donde están las grandes figuras del hip hop. Igualmente, siguiendo mi camino, no porque vaya a EEUU voy a dejar de hacer música brasileña. Tengo mucho interés de llevar a mis hijos para que aprendan inglés y estudien.

-El 30 de octubre se reunieron para dar un show con Planet Hemp, tu antigua banda. ¿Cómo estuvo?

-Fue un show aniversario de MTV Brasil y nos invitaron a juntarnos. Fueron sólo seis canciones. Estuvo buenísimo; tan bueno que estamos pensando en hacer cinco o seis conciertos más el año que viene.

-¿Eso incluye la posibilidad de nuevas canciones?

-Creo muy difícil que hagamos nuevas canciones, será solo un revival para volver a tocar esas canciones y sentirlas. Hacía diez años que no nos juntábamos y se encendió un fuego, una llama que es muy buena.

-Hablando de Planet Hemp, término sinónimo de maconha o marihuana, ¿qué significó ser procesado por tus ideas al respecto?

-No fue una sorpresa. Brasil acababa de salir de una dictadura militar y evidentemente no tenía mucha libertad de expresión, incluso ahora está un poco difícil al respecto, aunque es mejor, claro. Hace trece años de ese hecho y Brasil cambió mucho, me tocó ser parte de eso.

-Tus temas en cierta medida siguen expresando lo mismo…

-Claro; ¡estoy cada vez más convicto!

-Hace un par de días se votó en California la despenalización y ganó la postura de que siga todo como hasta ahora…

-Juro que pensé que sería legalizada en California. El mundo aún es muy idiota. Hubiera sido un paso importante para todo el mundo, no sólo para los EEUU y California.

-Provenís de un barrio humilde de Río de Janeiro. ¿La fama marca una distancia con la realidad de la calle a la hora de componer?

-Te contesto con una frase del nigeriano Fela Kuti con la que concuerdo: “Puedes salir del gueto, pero el gueto no sale de ti”. La cuestión va por dentro.

-Si hablamos de la violencia, en las calles de Río de Janeiro da miedo, ¿es verdad lo que muestra la TV?

-Mira, no es verdad, es mucho peor. Aunque el actual gobernador arrancó con una política de represión al tráfico, pero es una política pacificadora, más enfocada en el cuidado y la prevención que en el intercambio de disparos. Él llevó policías a las favelas, planes de salud y educación, que es muy importante para que la gente se sienta parte de la sociedad. Pienso que la violencia en estos últimos tres años ha disminuido. El gobernador ha sido reelecto por cuatro años más, por lo que tiene un buen camino por delante. No obstante, será muy difícil acabar con la violencia como en cualquier ciudad grande e importante que siempre la tendrá. Aunque en Río el problema era grande, era una guerra civil, moría más gente que en Irak, creo...

-¿Hasta qué punto esto afecta tus composiciones?

-Yo escribo mucho sobre eso. Para quien escribe, Brasil es un país perfecto e inspirador: lleno de bellezas naturales, pero inmerso en una confusión malvada donde hay corrupción, policía violenta, etcétera. Para un poeta es muy bueno. No quiero decir con esto que me guste, pero es así y ayuda en la poesía.

-¿Pensás que el poder del mensaje de la canción puede contribuir a cambiar la realidad?

-Sí; la canción tiene más fuerza que cualquier discurso político.

-Ganó Dilma Rousseff, tienen nueva presidenta, ¿el pueblo está feliz?

-Sólo el 50%; digamos que el 58% sí, pero el otro 42% no...

-¿En cuál de esos porcentajes te ubicás?

-Dentro del 1% que no es parte de ninguno de los dos. Estoy contra todo y todos, principalmente los políticos.

-¿Inclusive de los que se proponen bajar el nivel de pobreza?

-Esa propaganda es un poco equivocada porque no es asunto de Lula y el PT [Partido de los Trabajadores], Fernando Henrique Cardoso venía haciendo eso antes… todo bien, el gobierno del PT también tiene sus valores.

-Para finalizar, ¿qué show veremos aquí en Montevideo?

-La última vez que estuve en Montevideo quedé muy emocionado. Cuando terminó el show toda la banda se abrazó. Fue muy bonito porque no esperábamos tanta gente y una recepción tan buena. El show que verán es el que estamos haciendo desde principio de año, el mismo que llevamos por Europa, Nueva Zelanda y Australia. Contiene canciones de A arte do barulho, bastantes cosas de A procura da batida perfecta y Eu tiro é onda, más alguna de Planet Hemp, que después de la reunión quedé con ganas.

-¿De Bezerra no?

-Puede ser; pero es difícil porque la banda aún no está pronta y nos saldríamos del show estipulado. El disco acaba de salir en Brasil y recién lo presentamos el 20 de noviembre por primera vez. Igualmente, el show hace una recorrida por todos mis discos y algo podremos intentar.