Por la línea

En el plano regional se hace mención a la elección de Dil-ma Rousseff como presidenta de Brasil y la continuidad de Guido Mantega al frente del Ministerio de Economía, mientras que Alexandre Tombini se haría cargo del Banco Central, donde hoy es jefe de regulación financiera. “La continuidad de gran parte del actual gabinete ministerial pronostica el mantenimiento de los lineamientos en materia económica”, añade. Acerca de declaraciones de Rousseff en el sentido de que “se tomarán todas las medidas posibles para reajustar el tipo de cambio”, que generaron incertidumbre sobre una posible devaluación del real, la consultora analiza que “no existen condiciones que permitan esta medida”.

El informe contextualiza desde la situación nacional y refiere al tema que ocupó el mayor espacio mediático de las últimas semanas: la conflictividad gremial, señalando que el punto central tiene como eje la discusión de la Ley de Presupuesto, con sindicatos públicos y gobierno desarrollando “una confrontación importante”. Prevé que “hasta el momento en que se apruebe el proyecto de Ley de Presupuesto las movilizaciones y reclamos continuarán e incluso se intensificarán”. No obstante, agrega que el sector privado bajó su conflictividad respecto de los meses anteriores, si bien en la negociación colectiva “no se han logrado avances relevantes”.

Evalúa que “el nuevo concepto de ajustar los salarios por indicadores de productividad, si bien es un elemento importante y contribuye a una aproximación más justa a la remuneración según el desempeño de los trabajadores, es de difícil acuerdo por su complejidad intrínseca”. De acuerdo a Oikos, “se debería haber profundizado en los conceptos incluidos y acordado previamente, de manera de llegar a estas instancias de las negociaciones con avances significativos que no obstaculicen los acuerdos”; esta situación mantiene “latente” la posibilidad de un importante nivel de conflictividad para los próximos meses. Tales elementos “deberán ser considerados como insumo importante por el gobierno para futuras instancias”, aconseja.

En materia de inflación, recuerda que los precios continuaron en los últimos meses la tendencia comenzada a mediados de 2009, cerrando a octubre con un alza interanual de 7%. Para mitigar las presiones alcistas el gobierno utilizó “distintas alternativas”, como posponer ajustes de tarifas o extender el plazo de exoneración de IVA a algunos bienes de consumo, aunque “sin éxito en los resultados”. Ello se debió a la persistencia de presiones de un importante grupo de bienes y servicios (principalmente no transables) que llevarán a cerrar el año desbordando el techo del rango oficial (7%). La consultora estima que en 2011 y 2012 se producirá “un leve descenso de la inflación minorista, aunque su evolución estará pautada por el comportamiento del consumo interno”.

Tipo nada

En cuanto al tipo de cambio, pese a los anuncios intervencionistas del gobierno y al cambio en la perspectiva de los agentes, que empujaron al alza el precio del dólar, Oikos explica que “los fundamentos económicos de mediano plazo -incertidumbre financiera internacional y fuerte ingreso de divisas al país, entre otras- aún persisten, lo que no fundamenta un cambio relevante de las proyecciones del tipo de cambio a nivel local”. Relacionado a esto, detalla que la competitividad medida a través del tipo de cambio real (TCR) cerró setiembre (último dato disponible) con una baja de 0,2%, por una caída de 1,2% del indicador extrarregional y una suba de 0,5% del regional; en lo que va del año, el TCR global acumula una recuperación de 0,7%, opuesta evolución respecto de los últimos 12 meses, que marcan una caída de 7,2% extendida a todos los países que conforman el índice, incluso Brasil. Remarca que en el último año móvil la pérdida de competitividad fue de 19,4% frente a la Unión Europea, 10,8% a Estados Unidos y 7,5% a China, y descarta cambios relevantes en la competitividad de corto plazo. “El escenario actual de un dólar depreciado a nivel internacional, pero más a nivel doméstico y un registro inflacionario superior al promedio de la mayoría de los países (con excepción de Argentina) no presentaría variaciones sustantivas en los próximos meses”, describe.

Sobre el intercambio comercial de bienes, pronostica que “durante 2011 y 2012 el déficit comercial se mantendría en valores similares con una leve tendencia descendente”, pero el dinamismo exportador “continuará por efecto de mayores niveles de ventas asociados al excelente dinamismo que registran Brasil y los demás países emergentes”.

Para Oikos, el principal factor de incertidumbre es la situación económica de Europa, “que de no mejorar puede afectar las exportaciones de nuestro país a ese continente”. “Los efectos provendrían por una caída de la demanda y de manera indirecta, por una posible depreciación del euro que afecte la competitividad”, apunta. Respecto del mercado laboral, destaca los buenos resultados en empleo, actividad y desempleo, este último en mínimos históricos. Estima “probable que el desempleo observe una leve baja en el próximo trimestre, consecuencia de la mayor actividad del comercio en la última parte del año, lo que representaría un nuevo mínimo histórico”.