La recaudación de la DGI creció 6,8% en la primera mitad del año medida en términos netos (excluida la devolución de impuestos) y descontando el efecto inflacionario, mientras que en términos brutos la variación real fue de 5,5%, según el informe mensual de la unidad.

Se detalla que el aumento registrado entre enero y junio se basó fundamentalmente en la suba de los ingresos del IRAE, seguido de cerca por alzas en el producido del Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y el Impuesto Específico Interno (Imesi); por el contrario, el Impuesto al Patrimonio (IP) mostró una importante variación negativa en el semestre.

Cabe destacar que si se excluyen la recaudación del IRAE entre las empresas públicas y otros ingresos extraordinarios percibidos en algunos meses de 2009, los ingresos del organismo muestran un incremento real de 8,1% en el período.

Según explicó el ex director de Rentas y actual titular de la Asesoría Tributaria, la DGI establece “un compromiso de gestión con el Ministerio de Economía que se renueva anualmente, en el que se fijan metas de recaudación, de mejora en la calidad de los servicios, de la información que se brinda, de contralor de la evasión”. No obstante, Hernández puntualizó que “aún no se ha firmado” el correspondiente a este año, pero enfatizó que el principal objetivo ya asumido es “lograr un incremento de la recaudación que supere la evolución del PIB”. Para alcanzar ese nivel, añadió: “Se debe mejorar permanentemente la eficiencia de la DGI”, lo que implica reducción de la evasión tributaria.

A mitad de camino

En el análisis por grupo de impuestos se aprecia que los tributos al consumo aumentaron su resultado 4,7% en términos reales, debido a subas tanto del IVA como del Imesi. En el primer caso, en el acumulado enero-junio de 2010 la variación interanual fue de 3,3%: el IVA Interno creció 2,6% y el de Importaciones lo hizo 4,6%.

Por su parte, los ingresos por Imesi crecieron 12,4%, destacándose la suba del rubro Combustibles (+11,8%), que es el de mayor incidencia; los giros que le siguen en importancia también mostraron importantes aumentos: “Tabacos y cigarrillos” creció 17,9%, mientras que el de los “Automotores” lo hizo 32,1%.

En otro orden, los impuestos a la renta crecieron en conjunto 13,2% en términos reales, destacándose el aumento del IRAE, que a precios constantes aumentó su recaudación 14,5%, aunque con comportamientos diferentes en su interior: un sustancial aumento de 132,9% en los pagos de las empresas públicas y una baja de 3% en las empresas privadas; no obstante, el informe advierte que “estos resultados están distorsionados por ingresos de caja extraordinarios”. El Impuesto a la Enajenación de Bienes Agropecuarios (Imeba) verificó un incremento de 12,2% en el semestre, aunque cabe recordar que la primera mitad de 2009 (base de comparación) fue un año de baja recaudación en este tributo, debido al impacto de la crisis sobre el sector agropecuario.

En otro orden, el IRPF aumentó su recaudación 13,1% en términos reales, mientras que el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS, sustituyó al IRPF a los jubilados) lo hizo 17,9%. Por último, la recaudación del Impuesto a la Renta de los No Residentes (IRNR) acumula una baja de 3,5%, con registros negativos en tres de los seis meses comprendidos.

En lo que refiere a los impuestos a la propiedad, en su conjunto cayeron 7,5% en el semestre. En su interior, el IP exhibió una disminución de 12,1%, con un leve aumento de los ingresos provenientes de las empresas públicas (+2,4%) y una caída de las privadas (+18,1%), en tanto que la recaudación del Impuesto a las Transmisiones Patrimoniales aumentó 41,1%.