El principal competidor de la producción uruguaya exportable es uno de sus dos socios comerciales más importantes, Argentina, cuya oferta exportable es similar a la del país en casi 60%, relación explicada fundamentalmente por el rubro carne bovina congelada, que expresa aproximadamente el 25% de esa similitud de acuerdo al informe Concentración de la oferta exportable de Uruguay en los principales competidores, elaborado por el Instituto Uruguay XXI con datos de 2010.
Casi el 20% de aquel total se basa en el producto habas de soja, seguido por arroz, trigo y leche, con lo cual los cinco productos citados dan base al 50% de la canasta común de ventas externas. Con Países Bajos (Holanda) la similitud de oferta exportable ronda el 40%, no por la soja -que ese país europeo recibe y reexporta- sino principalmente por carne bovina congelada, y en menor medida por arroz, trigo y animales vivos. Otro competidor relevante de Uruguay es Nueva Zelanda, cuya oferta comercial también se aproxima a la local en aproximadamente 40%, guarismo del cual más de la tercera parte se basa en carne bovina, tanto congelada como fresca o refrigerada. Sin embargo, en esta relación también hay competencia en bienes como artículos para el transporte o envasado de plástico y madera en bruto.
Con Australia, otro protagonista de fuste en la producción agropecuaria mundial, Uruguay tiene una similitud de algo más de 38%, principalmente por carne bovina congelada, madera y plásticos, y en menor medida leche y arroz. Con Brasil la similitud roza el 37% y se explica en las colocaciones de carne bovina congelada, trigo, arroz y carne bovina fresca o refrigerada. Bélgica y Uruguay comparten la composición de sus respectivas ofertas en 35% y en torno a las colocaciones -básicamente- de arroz y trigo, y en menor medida de habas de soja, madera en bruto y carne bovina fresca. Con España la similitud supera en dos décimas el 32% y se basa en arroz, trigo y carne congelada.
Buscan su destino
El informe analiza después el grado de concentración de los productos en Uruguay y sus competidores mediante un indicador específico (IHH). Las ventas del primer rubro exportable del país, carne bovina congelada, registran una importante diversificación de destinos que el IHH ubica en 14,2%, marca más elevada que las de sus competidores exceptuando a Holanda.
En el examen de concentración de cada producto respecto de la concentración promedio, las colocaciones uruguayas de carne bovina congelada presentan un grado cercano al promedio. Algo parecido ocurre con la carne fresca o refrigerada, cuyas ventas verifican
la concentración más baja (11,5%) respecto de las que realizan los competidores, “bastante debajo del promedio”. “Esto refleja una ventaja que tiene Uruguay en relación a sus principales competidores, en el sentido de que el principal producto exportado tiene la mayor diversificación a nivel de destinos”, constituyendo “un factor altamente favorable de la oferta exportable uruguaya”.
La segunda partida exportada desde el país durante el año pasado fue habas de soja, cuyo IHH marcó 44,5%, explicado por las compras que hacen en territorio no franco uruguayo las empresas exportadoras radicadas en la Zona Franca de Nueva Palmira. Desde este exclave el producto es reexportado fundamentalmente hacia China (73,1%), Holanda (22,5%) y Venezuela (4,3%). Sobre la concentración de ventas de este bien surge que Uruguay se ubica cerca del promedio de sus competidores, que también es elevado, sobre todo en Argentina. “Así, la escasa diversificación se configura como un riesgo relativo”.
Cereales es uno de los capítulos más relevantes del país y en el caso del arroz, producto emblemático de la producción local, el IHH marcó casi 27%, una “baja concentración” aunque “es la más elevada” de acuerdo al análisis comparativo, significando que los competidores distribuyen mejor su clientela. Pero el trigo llega a una concentración de destinos del 50%, “muy por encima del promedio”, implicando “un potencial riesgo para Uruguay”, lo que determina “la necesidad de intentar aumentar el número de mercados en los que se colocan estos cereales”.
El informe prosigue con la madera en bruto, que “se está consolidando como uno de los principales productos exportados por Uruguay”, siendo “mayor aún el potencial exportador” y cuyo IHH superó en 2010 el 70%. El grueso de las compras de este bien en territorio no franco lo realiza la compañía UPM desde la Zona Franca de Fray Bentos, operativa que explica el guarismo, pero “todos los competidores de Uruguay tienen una concentración significativamente menor por destino”. Y al examinar la distancia entre el guarismo local y el promedio “se observa que las exportaciones de madera en bruto están bastante más concentradas que el promedio”, si bien “el riesgo en este caso es relativo por el efecto estadístico mencionado”.
Las ventas de leche y nata, y de quesos y requesón, presentan bajos niveles relativos de concentración por destino, pero “los principales competidores (...) tienen bastante más diversificadas sus exportaciones”, lo que refleja “la potencialidad que tiene Uruguay para seguir diversificando mercados para colocar productos lácteos”.
Los artículos de plástico, que incorporan más valor agregado, ganan importancia en la canasta de bienes exportables del país, aunque su concentración supera el 70%, con el mercado brasileño como destino principal. La distancia del promedio “es muy alta” y las ventas de los competidores están “significativamente más diversificadas”.
La concentración de destinos de lana y pelo fino “es relativamente baja” pero se trata de un producto que “cada vez tiene menor relevancia en la oferta exportable uruguaya”.
El informe excluye la malta, comerciada por una multinacional brasileña entre Uruguay y Brasil, destino total de la producción, y los animales vivos, cuyo gran dinamismo de 2010 obedeció “a una coyuntura especial”.