El Tipo de Cambio Real (TCR), usado como herramienta de medición de la competitividad de la economía, sufrió durante 2011 un “marcado deterioro” como parte de una evolución que se verifica al menos desde 2008, y que “representa una importante limitante para que sectores como el textil y la vestimenta, entre otros, puedan diversificar su mercado destino ante las trabas impuestas por Argentina”.

El resumen surge del último informe Panorama económico, de febrero, que elabora la consultora Oikos, en el que se agrega: “Excepto por Brasil, el país presenta desventajas competitivas por precio con la mayoría de sus socios comerciales relevantes”.

Se recuerda que durante el período aludido, el tipo de cambio nominal apenas registró un incremento en el tercer trimestre de 2010, cuando verificó una suba bimensual de 9,4%. “La continua apreciación del peso y la suba de los precios domésticos han determinado una pérdida de competitividad -según este indicador- de 28,6% en los últimos cinco años”, reza el texto del instituto de investigación.

La relación del TCR bilateral con China se mantuvo estable al mejorar un leve 0,4% y se deterioró 6,1% respecto de la Unión Europea, dentro de la cual la pérdida mayor de capacidad de competir se constató con relación a Alemania al marcar 6,5%. El deterioro del TCR con EEUU fue de 5,2% y con México, de 14,2%. El documento ejemplifica con el caso de la participación de EEUU en el total de exportaciones uruguayas, que desde 2005 hasta ahora descendió de 22,3% a 3,1%. “Sin embargo este mercado continúa concentrando la demanda de bienes de alto valor agregado como los Cueros curtidos, Cueros hechos luego del curtido, Carne bovina congelada y Carne bovina refrigerada, entre otros artículos”.

Con el conjunto de los principales socios comerciales del país el deterioro del TCR fue 9,1%, respecto de Argentina fue 6,5% y con relación a Brasil alcanzó 9,8%.

Pero las evoluciones de mediano/largo plazo difieren en uno y otro caso, ya que el TCR bilateral con Argentina es 57,4% más bajo que en 2000, en tanto que con Brasil es 28% superior.

Sobre ese contexto, el gobierno anunció el miércoles de noche la próxima instrumentación de una batería de acciones orientadas a dar respuesta a los efectos negativos que sobre sectores productivos locales empiezan a generar algunas medidas oficiales de corte proteccionista que aplica el gobierno argentino en el campo del intercambio comercial. Presentadas por el ministro de Industria, Roberto Kreimerman (ver la diaria de ayer, página 13), se dividen en dos ítems
correspondientes a “Estrategia industrial” e “Industrias afectadas por la coyuntura internacional”, que incluyen siete puntos cada uno. Los del primer grupo son: “1. Subsidio para la reducción de la tasa de interés a PYMES para la renovación tecnológica, préstamos en moneda nacional a tasa de interés real cero”; “2. Fondo para el Apoyo a la acreditación y certificación de calidad de las empresas nacionales”; “3. Subsidio para el registro nacional de nuevas patentes de PYMES y apoyo al patentamiento en el exterior”; “4. Régimen de importación de pequeñas partidas para la industria electrónica”; “5. Fondo para la diversificación de mercados o productos”; “6. Promoción de la autogeneración industrial de energía eléctrica basada en fuentes renovables” y “7. Decreto de declaración de interés nacional para biotecnología, en el marco de la Ley de Inversiones”. Los siete del segundo son: “1. Incorporación al régimen especial de devolución de impuestos a sectores afectados por la coyuntura económica internacional: Marroquinería, Peletería, Madera, Papel imprenta, Textil y Vestimenta, Calzado, Cerámica y vidrio, Artículos metálicos y Maquinaria no Eléctrica, y Pesca”; “2. Fortalecimiento del Área de Defensa del Consumidor para un mayor control y seguimiento de la normativa vigente: control y fiscalización de productos importados”; “3. Adecuación de los procesos asociados a la valoración en Aduana para calzado y vestimenta”; “4. Adecuación del seguro parcial de desempleo”; “5. Incremento de la tasa de anticipo de IRAE al 15% para las importaciones de calzado, marroquinería y vestimenta”; “6. Fiscalización de Aduana y Dinama para el cumplimiento de la ley de envases en los productos importados” y “7. Adelanto del pago del subsidio 2012 establecido por la Ley de la Vestimenta a empresas afectadas en el acceso al mercado argentino”.