250 páginas, gran formato, un diseño cuidadísimo y texto bilingüe son lo primero que impresiona de la nueva publicación de la Facultad de Arquitectura. Después llega el momento de dejarse impresionar por la diversidad y profundidad de muchos de sus artículos, que van desde lo abiertamente ensayístico a la presentación de proyectos arquitectónicos concretos.

La publicación viene a retomar una tradición interrumpida. Se trata del número diez de una revista que comenzó a publicarse en 1956 y conoció ocho ediciones hasta que llegó la dictadura cívico-militar. Con el retorno de la democracia también volvió la revista, pero la reaparición se limitó a solamente un número editado en 1986. En los años 90 y a principios de este siglo el espacio de reflexión y discusión fue ocupado por publicaciones como El Arqa y Revista Dominó, que contaban con aportes de docentes de la Facultad de Arquitectura (la última estaba directamente vinculada al taller Sprechmann de la institución) y eran producidas de manera externa, pero también vieron interrumpida su aparición.

Por eso, entre los proyectos con los que hace dos años asumió Gustavo Scheps como decano de la Facultad de Arquitectura estaba revivir la revista producida “oficialmente”. Comenzó a funcionar un comité editorial conformado por Martín Cobas, Marcelo Danza, Bruno di Giovannantonio, Marcelo Gualano, Luis Oreggioni y Nicolás Pérez, bajo la coordinación editorial de Marcelo Roux.

Dice Scheps en la presentación sobre el aporte deseable de la revista: “Para actualizar, multiplicar y profundizar el compromiso ético de responsabilidad social universitaria desde la excelencia, aportando definiciones cada vez más precisas y operativas acerca de (y desde) nuestras especificidades disciplinares. Para ofrecer su aptitud de generar miradas singulares, integradores, frescas y críticas, capaces de reintentar la unidad de sensibilidad y razón, para recuperar la verdadera inteligencia y proveer a la cultura de nuevas formas de ser y conocer”.

Sobre esto, Roux amplió en diálogo con la diaria que la revista, además de funcionar como un espacio de debate interno y hacia el resto de la sociedad, intenta posicionar mejor la producción de la facultad en el ámbito regional e internacional. De allí la edición en español e inglés y la incorporación de miradas de (y hacia) profesionales del exterior.

Por partes

La revista está organizada en tres secciones claramente diferenciables. La primera es una propuesta temática, que cambiará de número a número. En esta edición, el asunto es el espacio público. Lo abordan, entre otros, un extenso artículo del historiador y politólogo Gerardo Caetano (“A propósito de las políticas de ciudad en Uruguay: la ciudad batllista y algunos ecos contemporáneos”), un ensayo de Laura Alemán (“En voz baja: lo público intimidado”), otro de Lucio de Souza (“Apuntes sobre la quimera de lo público en modo concursos”), una reflexión del estadounidense Aaron Betsky (“¿La planificación urbana ha llegado a su fin?”) y el trabajo ganador de la convocatoria interna (el resto de los textos fueron solicitados por el comité editorial), a cargo de Liliana Carmona (“Tres tiempos: ser y estar en el espacio público”). También en esta sección se presentan y discuten diversos anteproyectos relacionados con el tema principal, como “Bestiario”, que propone entender los eventos que roderon la llegada en los años 30 del Graf Spee y el Zeppelin, más el Palacio Salvo, como un nuevo tipo de museo. También aquí se incluye un fotorreportaje (“La odisea del espacio”), a cargo de Magela Ferrero.

La segunda sección se denomina “Samotracia”, en alusión a la reproducción de la Victoria de Samotracia que adorna el hall de la Facultad, ya que apunta a contenidos internos y periódicos, como las presentaciones al premio Archiprix, la Bienal de Arquitectura de Venecia o la casa de Arquitectura Rifa.

“En la casa” es el título de la tercera sección, que consiste en entrevistas realizadas en la Casa Vilamajó, transformada hace un año en un museo gestionado por la facultad. En esta edición, la entrevistada es la española Sara de Giles, cofundadora del estudio Morales-De Giles-Mariscal (MGM). Además de un extenso diálogo, se presenta y comenta un proyecto de MGM, el Aulario de la Universidad Pablo de Olavide.

Además de estas secciones, un noticiero interno atraviesa las distintas páginas de la revista.

Paralelas

La revista será presentada mañana a las 19.30 en el hall de la facultad, que hasta dentro de un par de semanas será el único lugar para conseguirla, hasta que llegue a librerías especializadas y centros culturales. Con un costo estimado de entre 400 y 500 pesos, la nueva revista se propone aparecer en forma bianual, por lo que el número 11 se estima para marzo/abril de 2013.

Entre los planes, adelanta Roux, está incluir material sobre las nuevas carreras que se desarrollan en la facultad, como Diseño Industrial, Diseño de Comunicación Visual, Diseño Integrado (Regional Norte) y Diseño de Paisaje (Regional Este). Además, se planea hacer un concurso para la función que ocupa hoy Roux (asimilable a secretario de redacción), para separar la publicación del ámbito del decanato de la facultad, donde nació. Entre los objetivos de la revista, aclara Scheps en su presentación, está volverse autosustentable.