El déficit fiscal en 2012 alcanzó a 2,8% del Producto Interno Bruto (PIB), según informó ayer el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). La cifra es casi el triple del déficit verificado en 2011 y está por encima de la mediana de la última encuesta de expectativas del Banco Central (2,6% para el cierre del año) y de la última previsión del MEF, que esperaba que 2012 cerrara con un déficit de 2,2% del producto.
Según las cifras publicadas por el MEF, el déficit que registró el sector público en 2012 llegó a 2,8% del PIB, 1,9 puntos porcentuales más si se lo compara con el 0,9% alcanzado en 2011. Según el comunicado, al dejar los factores extraordinarios (como el sobrecosto energético) de lado, el resultado global fue negativo en 1,9% del PIB. Este aumento se registró en mayor proporción por el aumento de los egresos del sector público no financiero, por el leve detraimiento que tuvieron los ingresos y la baja de los intereses del sector.
Por un lado, los egresos primarios del sector público no financiero se incrementaron 1,9% del PIB durante 2012. Este aumento se fundamenta sobre todo en el impacto de las pasividades en 0,3% del PIB respecto del año anterior, así como en el crecimiento de la masa salarial formal “por su efecto en las prestaciones de seguridad social a activos y transferencias a AFAP”.
Por otro, los ingresos del sector público no financiero cayeron una décima porcentual respecto de 2011. En este rubro el gobierno central disminuyó sus ingresos 0,4% del PIB, en gran medida por la caída del resultado de “otros ingresos” que agrupa, entre otros, los ingresos por Fondos de Libre Disponibilidad y los aportes de utilidades de entes públicos al gobierno.
La Dirección General Impositiva, por su parte, tuvo una reducción de una décima porcentual en su recaudación comparada con la de 2011. Asimismo, el resultado primario de las empresas públicas se redujo 0,3%, explicado por un resultado menor de UTE, debido a las sequías que afectaron el abastecimiento de energía eléctrica los primeros ocho meses del año. Este comportamiento se compensó parcialmente por una mejora de los resultados de ANCAP, dado el “alineamiento” de sus tarifas a sus costos de producción. Por otro lado, el Banco de Previsión Social incrementó 0,6% su recaudación respecto de 2011, año en que los aportes por seguro de enfermedad explicaron la mitad del incremento.
El resultado primario del gobierno, sin considerar el pago de intereses, fue -0,2% y los intereses de deuda pública, que fueron de 2,6% del PIB, se redujeron 0,3% del PIB respecto de 2011.
El ministro Fernando Lorenzo, durante el Consejo de Ministros de ayer, instancia en la que sus colegas dieron a conocer las prioridades de las respectivas carteras para 2013, hizo un llamado a mantener la austeridad en el manejo del gasto y afirmó que este año sólo habrá recursos adicionales para el funcionamiento de la Universidad Tecnológica.
Vale la pena recordar que el MEF elevó su proyección de déficit dos veces durante 2012: primero de 1,2% a 1,7% del PIB en el marco de la Rendición de Cuentas y luego, en octubre, situándola en 2,2%.