El crédito al sector privado en moneda nacional está mostrando un fuerte crecimiento en el primer trimestre del año, de acuerdo a cifras incluidas en el Informe Trimestral de Política Monetaria del Banco Central del Uruguay (BCU). Al mismo tiempo, como consecuencia de la aceleración inflacionaria, se observó en los primeros meses del año una retracción de los depósitos a plazo considerados en términos reales.

Medidos en términos constantes, el crédito en pesos concedido tanto por el Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU) y el Banco Hipotecario como por los bancos privados, creció más de 10% en promedio en la variación anualizada de la tendencia-ciclo en el trimestre finalizado en febrero. Los datos de la autoridad monetaria destacan que la aceleración del ritmo de crecimiento del crédito en moneda nacional indicaría que el consumo de las familias continúa en expansión en los primeros meses de 2013.

Por otra parte, el volumen de crédito en dólares corrientes se aceleró en el trimestre móvil cerrado en febrero, como consecuencia de la expansión realizada por la banca privada, que en promedio creció 30% en la variación anualizada de la tendencia-ciclo. Por su parte, el crédito en moneda extranjera otorgado por el BROU creció por debajo: 11,5% en el mismo período analizado.

El informe señala que en el primer trimestre del año el principal destino del crédito en moneda extranjera fue el sector comercio, seguido por la construcción y el agro.

En marzo, en el marco de las medidas adoptadas para controlar el alza en los precios, el BCU dispuso un aumento del monto de las obligaciones de encajes bancarios, de 20% a 25% la tasa de encaje marginal sobre depósitos en moneda nacional y elevando de 40% a 45% el encaje marginal en moneda extranjera. Dicha medida comenzó a regir el 1º de abril, por lo que es problable que la expansión mencionada del crédito se desacelere en los próximos meses, lo que, según el informe, contribuirá a disminuir las presiones inflacionarias provenientes del gasto privado.

Que se vean

El informe destaca que se observa una reducción de los depósitos totales en términos reales, como consecuencia de la caída fundamentalmente de los depósitos a plazo, ya que los depósitos a la vista tuvieron un incremento en los primeros meses del año.

De acuerdo a la información de los flujos de depósitos a plazo, que reflejan tanto las operaciones nuevas como las renovaciones, en los últimos meses los depósitos en Unidades Indexadas -que se ajustan con la evolución del Índice de Precios del Consumo- mantienen una tendencia creciente, mientras que los depósitos a plazo en pesos nominales se ubican 5% por debajo del promedio de 2012 en términos reales.

El informe de política monetaria concluye que en un contexto de aceleración inflacionaria, los agentes residentes prefieren “buscar refugio en los depósitos a plazo indexados a inflación o canalizando sus ahorros hacia los títulos públicos en moneda nacional”.