“La inmigración es positiva” lleva como nombre la campaña que lanzó ayer el MRREE, y que busca, de acuerdo a la información institucional, “lograr una empatía entre uruguayos y uruguayas e inmigrantes” mediante una contribución “a la eliminación de estereotipos y mitos sobre la inmigración y los inmigrantes, transmitiendo el enfoque de derechos”. La campaña se lleva a cabo con el apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones, la Junta Nacional de Migración y la Dirección Nacional de Impresiones y Publicaciones Oficiales, que la incluirá en su programa “La ley en tu lenguaje”.

El canciller Luis Almagro admitió que en la cartera se han asentado denuncias de uruguayos retornados que recibieron malos tratos en dependencias públicas cuando realizaban trámites. “Imagínense cuando quien tramita una residencia, sus papeles, sus documentos o un trabajo, es un extranjero”, comentó. En ese marco, dijo, “hubo capacitación para funcionarios públicos”, pero “hay todavía mucho por resolver”, queda “mucha cabeza por cambiar”. “Es un tema social que nos trasciende a todos”, añadió.

En la población total del país los inmigrantes representan 2,4%. De acuerdo a datos aportados por Almagro durante la presentación, los inmigrantes se discriminan en: 35% argentinos, 17,6% brasileños, 9% estadounidenses, 7% españoles, 4,1% peruanos, 2,8%paraguayos, 2,7% chilenos, y 5,4% del resto de América del Sur. “Estas tendencias parecen ir en aumento”, señaló.

Este proceso “nos encamina a una sociedad más abierta, más solidaria y más intercultural”, siendo “ése nuestro principal desafío”, pues “supuestamente somos los maestros en la tolerancia, en respetar y en no discriminar, pero nos ponemos poco a prueba”, comentó el canciller, llamando a “ver con cierta alarma algunas cifras”, como por ejemplo que el porcentaje de afrodescendientes en Uruguay se multiplica sólo cuando se observa quiénes están por debajo de la línea de pobreza. “Algo está mal allí”, reflexionó.

Si bien destacó que “Uruguay ha tenido, a lo largo de su historia, la capacidad de dar la bienvenida”, recordó los diferentes procesos a lo largo de la recepción de migrantes en tierras orientales, hasta la década de 1960, cuando se pasó de ser receptor a ser expulsor. “Fue un punto de inflexión”, indicó.

Qué seduce

Los factores que hacen “atractivo” a Uruguay para migrar, según Almagro, tienen relación con el “crecimiento económico, la estabilidad social financiera del país, la baja tasa de desempleo y la reducción de la pobreza. Todo esto hace que Uruguay sea un lugar de referencia para aquellos que migran”. A ello se suma una población envejecida. “Hay países que producen mucha juventud y tienen poco empleo, al tiempo que hay países que tienen capacidad de empleo pero no tienen juventud”. Ocurre que “los uruguayos tienen los hábitos reproductivos del oso panda, porque se aparean poco y tienen pocos hijos”, dijo.

Por otro lado, el director general de la Organización Internacional para las Migraciones, William Swing, afirmó que “la migración también se ve movida por la revolución digital”, pues hoy es más fácil acceder a información sobre las coyunturas de cualquier país. “La gente sabe dónde hay trabajo, dónde ir y dónde no ir”, explicó.

Para mayor información sobre la campaña se puede visitar el sitio www.impo.com.uy/migracion.