Una delegación de la Asociación Nacional de Empresas Recuperadas por los Trabajadores (ANERT) se reunió ayer en Buenos Aires con la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), para analizar los efectos de las restricciones dispuestas por el gobierno argentino al comercio bilateral. Por la ANERT participó su secretario general, Daniel Placeres, y representantes de la imprenta Pressur, una de las empresas más afectadas por las restricciones argentinas. Fueron recibidos en la sede de la CTA por el secretario general, Hugo Yasky, y otras autoridades de la central.

“Les planteamos que se precisa buscar vías alternativas al comercio con Argentina”, explicó a la diaria Enrique Gaucher, de Pressur. Puso como ejemplo el acuerdo logrado en setiembre de 2013 entre Pressur -que integra la ANERT- y la Red Gráfica Cooperativa de Argentina -integrante de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo, CNCT- para la complementación productiva y de mercados, el intercambio de tecnología y la formación de operarios gráficos de ambos países.

Ahora se busca extender este modelo a todas las empresas autogestionadas. La ANERT propone la firma de un acuerdo de libre comercio entre empresas autogestionadas de ambos países, que elimine las restricciones impuestas al comercio bilateral por el gobierno de Cristina Fernández. Cuenta para ello con el apoyo de la CTA, la CNCT y la Federación Argentina de Cooperativas de Trabajadores, sostuvo Gaucher.

Explicó que se busca que el gobierno argentino tenga un tratamiento diferencial con este tipo de empresas, que no buscan “lucrar sino mantener las fuentes de trabajo”. Se le pidió a la CTA que realice gestiones ante el gobierno argentino, luego de que la misma central tuviera éxito en destrabar una exportación de la empresa autogestionada Metzen & Sena, por 450.000 dólares, la semana pasada. La central argentina se comprometió a conversar con las autoridades de su gobierno sobre la posibilidad de la firma de un acuerdo de este tipo entre las empresas autogestionadas de ambos países.

“Le estamos pidiendo respetuosamente esto al gobierno argentino. No somos multinacionales, somos empresas manejadas por los trabajadores, y de esto se benefician todos los trabajadores”, afirmó Gaucher.

La semana próxima habrá una nueva reunión con los mismos participantes en Buenos Aires, a la que se sumarán empresas cooperativas de Argentina. En cuanto a la situación de Pressur, las actividades de la imprenta continúan paralizadas y sus trabajadores extendieron el seguro de paro, que habían iniciado el 1º de febrero, para todo el mes de marzo. “Estamos en plena campaña para poder revertir esta situación en pocos días”, afirmó Gaucher.