“Uno de los mártires del SUNCA y único edil departamental que se encuentra desaparecido”. Así es como se presenta a Horacio Gelós Bonilla en la gacetilla de prensa de “Laguna, una obra de amor y lucha”, de Raquel Diana, que se presentará el viernes a las 20.30 en el teatro Solís, y que se extenderá por siete funciones.

La obra, que fue declarada de interés por la Dirección Nacional de Derechos Humanos, se centra en una mujer que decide pasar la última noche de su vida en la Laguna del Sauce, lugar donde vio por última vez a su enamorado, Horacio Gelós, y donde el obrero de la construcción fue asesinado.

Raquel Diana dijo a la diaria que siempre le ha preocupado cómo hablar de la gente trabajadora. Cuando pensó en esta historia -“que contaba con testigos aún vivos”- decidió investigar e ir al SUNCA (Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos) a dialogar con diversas personas. “Había un viejo portero del SUNCA, ya fallecido, que había trabajado con él [Gelós Bonilla]”, comenta, recordando los distintos sitios visitados, entre los que se encuentra el Batallón de Ingenieros Nº IV de la Laguna del Sauce, donde fue asesinado Gelós. El obrero militante del Frente de Izquierda de Liberación, que fue detenido el 6 de enero de 1976, había participado en la fundación del Frente Amplio (FA) a nivel departamental, y en las elecciones nacionales de 1971 había sido elegido edil suplente de la Junta Departamental de Maldonado por el FA.

“El proceso creativo implicó mucho tiempo, ya que me interioricé en la historia pero no sabía cómo acercarme a ella ni cómo escribirla”, dijo Diana, refiriéndose a la intensidad que vivió mientras estudió el caso. Junto a los testigos y los testimonios brindados, le resultó difícil el hecho de lograr “una poética que, en algún sentido, supere el realismo”. Sobre todo, porque considera que una primera tendencia es la reproducción literal de los sucesos. Sostiene que en general, para contar una historia, es necesario incluir otra. Por este motivo fue que la pieza se construyó a partir de una foto -de las pocas que existen de Gelós-, en la que se encuentra en la playa Mansa junto a una mujer, “de la que nunca pudimos averiguar su identidad”.

El estreno de la obra se llevó a cabo en Maldonado, y luego se presentó en Piriápolis, San Carlos y Pan de Azúcar. Según Diana, la experiencia resultó muy conmovedora y de emociones muy fuertes. Entre los espectadores se encontraban aquellas personas que conocían la historia, y de alguna manera fueron partícipes, y otras que “no podían creer que eso hubiera sucedido en Maldonado”. La respuesta para este tipo de personas provenía de otro espectador -cuenta la dramaturga-, que, alarmado, les preguntaba si no estaban al tanto de la existencia de otros casos, incluso de vecinos cercanos que padecieron historias similares.

“Recuerdo que en San Carlos un muchacho se encerró en el baño y envió a un amigo para que nos contara que a su abuelo le había sucedido lo mismo, y que él nunca había logrado comprenderlo. Más allá de lo artístico, se produce esa cuestión extra de repercusión social que se vuelve vital.” Por este motivo, Diana decidió montarla en Maldonado y con actores fernandinos, entre los que se encuentran Rodolfo Acosta, Álvaro Vila, Laura Manta, Fernando Figarola y Christian Toledo.

“Si pudiera coleccionar los momentos más importantes de mi vida, uno sería éste”, dice la directora, refiriéndose al encuentro nacional de delegados del SUNCA en el Platense Patín Club, donde presentaron la obra para más de 1.000 trabajadores de todo el país.

Luego del estreno en el Solís, Diana presentará una solicitud para realizar la puesta dentro del propio Batallón, ya que la ley de reparación de este tipo de espacios deja claro que deben promoverse manifestaciones culturales referidas a estas temáticas.