El director general de la murga La Gran Siete, Guillermo Lamolle, abandonó el carnaval hace unos días debido a un conflicto con DAECPU (Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares del Uruguay). Ayer, desde su cuenta personal de Facebook, el músico, compositor y fundador de esa murga expresó que no volverá “mientras el concepto de ‘Estado de derecho’ siga siendo algo absolutamente ajeno a nuestra fiesta”. Por ese mismo medio, el director explicó que durante la segunda rueda del Teatro de Verano, el personal de la Intendencia de Montevideo que trabaja en el escenario “desapareció momentáneamente (salvo la persona que los dirige, que dijo que ella no podía hacer nada si no tenía gente) en el momento en que La Gran Siete debía armar la escenografía” que debe subir a escena antes de la retirada. Cuando llegó este momento, “la que había desaparecido era la encargada en cuestión, por lo que hubo que subirla sin ayuda de nadie”.

Agrega que Iván Arroqui, encargado de la escenografía y el vestuario de la murga, discutió con la funcionaria encargada. Frente a esto, Lamolle dice que DAECPU “sancionó a Iván prohibiéndole la entrada al teatro por este año, sin preguntarle a él o a mí (el socio al que deben defender, se supone)” lo que había sucedido. Ante la queja del músico, DAEPCU le respondió que no podía permitir “esas actitudes”.

Según pudo conocer la diaria, esta suspensión no había sido notificada más que por medio de terceros. Ante el reclamo, DAECPU sólo respondió “no podemos permitir que pasen esas cosas”, y procedió a la suspensión del técnico, sin consultar a la murga por los hechos ocurridos. Por su parte, La Gran Siete continúa en los tablados sin su director, y hoy se presentará en el Monumental de la Costa a las 21.00.