“Le quiero pedir al Parlamento uruguayo que salve a la Cinemateca. Que salve su archivo fílmico. Que salve su escuela de cine. Que proteja el patrimonio más grande que tienen los uruguayos: su vocación de arte, de cultura y de memoria”, dice la actriz argentina Mercedes Morán en #soycinemateca, una serie de videos que produjo la comunidad audiovisual latinoamericana LALA, en la que participan figuras como el español Javier Rebollo, Jorge Drexler y Martín Sastre, con el objetivo de salvar a Cinemateca Uruguaya de la situación insostenible que enfrenta desde hace varios meses (ver ladiaria.com.uy/AEW3).

Luego de la alarma social que generó la amenaza de cierre de Cinemateca, el viernes, durante la celebración del bicentenario de la Biblioteca Nacional, la titular del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), María Julia Muñoz, expresó que esa cartera y la Intendencia de Montevideo (IM) apoyarán económicamente a la institución para que pueda sortear su crisis actual. A cambio, Cinemateca deberá vincularse con el sistema educativo formal y no formal, “poniendo a disposición su asesoramiento y sus recursos”, adelantó Muñoz.

El director general de Secretaría del MEC, Jorge Papadópulos, dijo a la diaria que la próxima semana estará más definido el acuerdo tripartito que se prepara, para el que aún se están intercambiando criterios. “Vamos a apoyar en lo coyuntural y apuntamos hacia un acuerdo de largo plazo, buscando que Cinemateca colabore con la educación, y nosotros con el desarrollo de actividades que involucren la exhibición y el lenguaje cinematográfico, entre otros, pensando de este modo en un modelo más sustentable”, explicó el jerarca, y aclaró que todo esto debe ser tomado “con pinzas”, porque aún se encuentran en medio de negociaciones. Por otro lado, la IM y el MEC también están dialogando sobre cómo equipar las tres salas cinematográficas que se construirán en el complejo cultural de la futura sede de la Comisión Andina de Fomento (donde estuvo el Mercado Central) y que le fueron asignadas a Cinemateca.

Un largo camino

Desde Cinemateca agradecieron el apoyo, a la vez que reconocieron que esperan que éste sea el primer paso en la búsqueda de mecanismos “sólidos y estables que garanticen la sustentabilidad de una institución que cumple una función de interés público”, como es la preservación del patrimonio fílmico nacional, la formación de espectadores y la exhibición “de un cine que de otra manera no llegaría a nuestras pantallas”. La directora de Cinemateca, María José Santacreu, reconoció la importancia de este primer paso para paliar la grave crisis actual, que de otro modo haría que la institución se encaminara al cierre de salas y del centro de documentación. En la actualidad hay varios empleados en seguro de paro “y el mes que viene probablemente haya más”, destacó.

“Tuvimos una reunión con el MEC y la IM, y se nos anunció que se iba a asistir a Cinemateca para sortear esta crisis, y que se conversaría acerca de la posibilidad de hacer algo más en profundidad sobre la estructura de la institución, para evitar que las crisis sean cíclicas y recurrentes. Sobre eso estamos empezando a hablar”, señaló Santacreu. La institución atraviesa problemas similares desde hace diez o 15 años, y la única diferencia en esta oportunidad es que la crisis se ha agravado, dijo.

Luego de esta ayuda inmediata, se comenzará a transitar un largo camino de negociación, en el que se estudiará, en conjunto, qué es lo que puede hacer cada uno de los involucrados. Esto “implica muchos proyectos, que hay que discutir cómo se implementarán”, mientras se intenta evitar que la exhibición de las salas resulte afectada, dijo la directora de Cinemateca. Como ejemplo de la difícil situación, que todavía está lejos de ser superada, Santacreu comentó que la institución recibió una carta en la que la Federación Internacional de Archivos Fílmicos amenaza con desafiliarla, debido a que debe el pago de sus cuotas desde hace dos años. Luego de recibir explicaciones sobre la situación, la federación los apoyó rebajando el monto de la deuda, pero aun así “está en peligro nuestra afiliación”, advirtió.

Consultada sobre la campaña de firmas que inició un socio (www.ladiaria.com.uy/UIQ) y que al cierre de esta nota llegaba a 10.643 expresiones de apoyo, la directora consideró que esa iniciativa le dio “una mayor visibilidad al tema”. Otro de los aspectos que destacó de esta campaña fue que, a su entender, muestra la dimensión de la preocupación social que despierta el tema.

“La prensa y los socios vinieron a Cinemateca, y recibimos distintos apoyos y pronunciamientos, como los de Fernando Cabrera o César Charlone. Todo esto no lo generó Cinemateca, sino la propia gente y la prensa. Esto reafirmó lo que nosotros creíamos con respecto a que la presencia de Cinemateca en la sociedad, a partir de las responsabilidades que asume y de sus exhibiciones, sigue siendo muy fuerte”.