El teatro preserva una de sus esencias ancestrales: el convivio, el encuentro. La necesidad social de reunirse lo ha preservado como una expresión artística colectiva, capaz de resistir corrientes adversas. En esa línea, apostando por la autogestión y por espacios de creación y financiamiento alternativos, hoy empieza el primer encuentro de Colectivos Teatrales Independientes de Montevideo, Al borde.
Surgió de la “necesidad de potenciar y visibilizar el trabajo de diversos colectivos que, desde hace años, trabajan e investigan el lenguaje teatral, generando espectáculos y producciones que se presentan por fuera” tanto del circuito oficial de salas como del comercial, dicen sus organizadores, y explican que también aspiran a convertirse en un espacio para discutir y reflexionar sobre su práctica, visibilizar su trabajo, ampliar su público y generar intercambios con el resto de la comunidad artística. Por eso, además de compartir espectáculos a lo largo de cuatro días, comenzarán hoy a las 18.00 con un diálogo público entre los grupos, moderado por el crítico Leonardo Flamia.
Al borde se hará en el espacio cultural Las Bóvedas (Rambla 25 de Agosto entre Ituzaingó y Juan Carlos Gómez), con entrada libre. Hoy abrirá el encuentro Una canción de amor idiota, dirigida por Ramiro Pallares, por La Carnicería, una compañía nacida en 2010. Es una obra anclada en el presente, que se propone explorar algo “tan simple y tan complejo” como “la vida” o el “nosotros”, por medio del encuentro y el juego, porque “no hay ficción más real que la escena compartida”.
Mañana se sumarán Claudia, la mujer que se casa (El Almacén) e Inés, eventualmente el amor triunfará, con dramaturgia y dirección de Florencia Caballero Bianchi (Elefante), que apuesta, desde la proximidad, al diálogo entre la pieza, el espacio y el público. El sábado habrá dos propuestas de teatro para niños, El monstruo (de Teatro de las Vacas, que reúne a creadores de Fray Bentos, Paysandú, Carmelo y Montevideo), basada en cuentos de la canadiense Suzanne Lebeau; y Caso 1811 (de En el Ruedo, creada para acercar la historia a estudiantes de educación inicial y primaria), en la que tres detectives investigan los principales acontecimientos de aquel año “tan agitado”. Además, se presentarán ¡Revivan!, dirigida por Diego Minetti Blanco (¡Rocanrol!), que se define como una forma de terapia alternativa, a partir de la experimentación en la relación médico-paciente; y Clown locura (Los Tenedores), en la que un personaje se enfrenta a la realidad como algo nuevo a descubrir y explorar.
El domingo comenzará con La caja de Pandero (Los Rusos), sobre la historia de un niño que enfrenta sus miedos con la ayuda de personajes fantásticos; y como cierre del encuentro se montará Ivona de cámara, dirigida por Sergio Luján (Laboratorio de Práctica Teatral). Esta propuesta parte de Yvonne, princesa de Borgoña, del polaco Witold Gombrowicz, y con base en aquella novela el colectivo -luego de su recordado trabajo anterior, Cuadrilátero Kartun- profundiza en el humor, la farsa y la parodia.