El abogado Óscar López Goldaracena presentó una denuncia penal contra los propietarios del depósito de fuegos artificiales que se incendió el 25 de octubre en las cercanías de Toledo, causando la muerte de cuatro jóvenes que trabajaban allí.

En declaraciones a Subrayado, López Goldaracena, que representa a la familia de una de las víctimas, dijo que presentó la denuncia “para que se indaguen las responsabilidades que podría caber por homicidio culposo”, figura que se produce “cuando existe negligencia, imprudencia, se violan leyes y reglamentos y se produce la muerte de cuatro trabajadores jóvenes”. El abogado recordó que, “según trascendió por dichos de la Dirección Nacional de Bomberos, ese depósito no contaba con la autorización de Bomberos”, por lo que nadie debía estar trabajando allí.

“Se viola la ley, se violan los reglamentos, se incurre en responsabilidad, y la Justicia tiene que dar la respuesta adecuada y eficaz para estas cosas. No sólo para que no vuelvan a ocurrir, sino para que en este caso concreto, que constituye el principal accidente de trabajo del año, exista justicia”, concluyó.