Las autoridades militares iraquíes confirmaron ayer el ingreso en Mosul, la ciudad ubicada al norte de Irak que está en manos del grupo yihadista Estado Islámico (EI) desde junio de 2014. Mientras tanto, EI endurece su respuesta y organismos internacionales alertan por la posibilidad de que esté utilizando civiles como escudos humanos. Por el momento, hay más de 20.000 desplazados a causa de la ofensiva, que empezó el 17 de octubre.