A dos días del atentado en Estambul que mató a 44 personas, la Policía turca detuvo a 235 personas sospechosas de estar vinculadas con el ataque, entre ellos más de un centenar de diputados del principal partido opositor, el HDP. El gobierno de Recep Tayyip Erdogan aseguró que tiene pruebas de que los detenidos forman parte del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), al que considera un grupo terrorista.

“Nuestra gente espera que derrotemos y eliminemos a esta organización terrorista, que ha atacado a nuestra nación durante 40 años”, declaró Süleyman Soylu, ministro del Interior turco, durante una visita de condolencia a un cuartel de la policía antidisturbios en Estambul, informó El País de Madrid.

La movilización de los efectivos policiales recorrió 11 provincias para realizar las detenciones. El portavoz del HDP, Ayhan Bilgen, criticó la operación policial y denunció que se trata de una nueva ocasión en la que el gobierno persigue a los opositores.