El ministro de Educación argentino, Esteban Bullrich, sostuvo hoy que su exclusión del último informe del Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes (PISA, por su sigla en inglés), de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), se debió a que el anterior gobierno, encabezado por Cristina Fernández, cometió “fallas graves” en la metodología de confección de la muestra.

Según informa la agencia de noticias Efe, el actual gobierno que encabeza Mauricio Macri argumentó que gracias a estas fallas, unas 3.000 escuelas quedaron afuera del informe, que se llevó a cabo en 2015. “La muestra no es comparable” con el resto de los países”, aseguró Bullrich en una rueda de prensa celebrada este martes en la Casa Rosada.

El jerarca calificó el error de “técnicamente grave” y dijo que “no hubo animosidad” del gobierno anterior sino “incompetencia”. Los colegios que quedaron por fuera no son de una zona específica del país ni tampoco fueron seleccionados de forma voluntaria, lo que demuestra que “no hubo específica voluntad” de alterar los resultados.

No obstante, dijo que esto refleja el “poco apego y compromiso” con las estadísticas del anterior gobierno. “Aquí el cuestionamiento no es a la educación pública, que tiene problemas, sino a cómo trabajaron los técnicos que debían construir la muestra”, sostuvo.

Ante las dudas, Bullrich dijo que se consultó a dos organismos independientes especializados en estadísticas, que ratificaron la imposibilidad de comparar los resultados con los demás países.

A pesar de esto, la ciudad de Buenos Aires sí fue incluida en el ránking oficial, y se ubicó en el puesto 38, por encima del resto de América Latina.