“No sé lo que hay detrás de tu voz. / Nunca te vi, vos sos los discos / que pueblan por las noches este departamento de París”, le escribió Julio Cortázar antes de que se volvieran grandes amigos durante el exilio compartido. Casi medio siglo después, la Tana Rinaldi continúa apostando contra el cliché del “tango macho” tan difundido, por ejemplo, por el poema “Por qué canto así” (“y yo me hice en tangos / porque el tango es macho”), que interpretaron Julio Sosa y Edmundo Rivero; y lo hizo con una voz y un estilo que comenzó a definir en 1946, cuando ingresó al Conservatorio Nacional de Música. Así, Rinaldi dejó de lado las inflexiones arrabaleras, impuso otro modo de cantar y optó por un repertorio minuciosamente seleccionado, entre los que se encuentran grandes exponentes del tango como José María Contursi, Enrique Santos Discépolo, Homero Manzi o Cátulo Castillo. Y si bien fue renegada por muchos tangueros de la vieja escuela, entre sus admiradores encontró decididos defensores, como la escritora argentina Victoria Ocampo.

Mañana a las 21.00 en el Auditorio del Sodre (comunidad la diaria 2x1), la multipremiada cantante festejará sus 60 años con el 2x4: junto a su quinteto y bajo la dirección del maestro Juan Carlos Cuacci recorrerá el celebrado repertorio que la consagró en varios países del mundo, incluyendo clásicos como “Yuyo verde”, “Tinta roja”, “Naranjo en flor”, “A un semejante” o “El trompo azul”.