La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, declaró que su país “seguirá participando en el Mercosur” porque “no hay razones jurídicas” para la suspensión de su membresía por parte de los otros integrantes del bloque.

“Es un golpe de Estado al Mercosur y constituiría una agresión a Venezuela de dimensiones realmente muy graves”, dijo.

Sus declaraciones se produjeron luego de que los cancilleres de Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay notificaran a su par venezolana que el país ha perdido los derechos como miembro del Mercosur, dada la “persistencia del incumplimiento de las obligaciones” que asumió tras unirse al bloque en 2012.

Para Rodríguez, “sólo intolerancia política” justifica la decisión del resto de los países del Mercosur. “El germen del fascismo está marcando estos hechos”, dijo.

En su cuenta en Twitter, la canciller venezolana había negado la existencia de una notificación de suspensión, aunque luego pasó a discutirla.

“Venezuela no reconoce este acto írrito sustentado en la Ley de la Selva de unos funcionarios que están destruyendo el Mercosur”, escribió.