Por tercera vez desde su reapertura, el Auditorio del SODRE presentará, como en 2010 y 2013, El lago de los cisnes, que volverá a ser interpretado por el Ballet Nacional del SODRE, bajo la dirección de Julio Bocca, desde el 31 de marzo hasta el 15 de abril. El argentino Raúl Candal será nuevamente el responsable de la coreografía y apostará a infundir una renovada impronta a este clásico universal, que contará con más de 60 bailarines en escena, junto a la Orquesta Sinfónica del SODRE, dirigida por Martín García. Como sucede desde que asumió Bocca, se espera una asistencia masiva.

Este ballet, compuesto por Piotr Ilitch Tchaikovsky, es considerado la obra más popular de la historia de la danza clásica y se ha convertido en una pieza paradigmática del repertorio romántico. Presenta a una princesa (Odette) transformada en cisne por un malvado brujo (Von Rothbard), con la particularidad de que por las noches vuelve a convertirse en mujer al borde del lago. Es allí donde la descubre un príncipe (Sigfrido), justo cuando va a cazar... cisnes. Él se enamora perdidamente de ella, aunque después una mala jugada del destino siga otros caminos. Los dos terminarán juntos, aunque no en los mejores términos, sellando así el fin de una larga batalla entre el bien y el mal.