El acto que el PIT-CNT organizó hoy en rechazo a la destitución de Dilma Rousseff como presidenta de Brasil tuvo como primer orador al secretario general de la central, Marcelo Abdala, que desde la mesa cubierta por la bandera verdeamarelha, calificó la decisión del Senado brasileño como un “abyecto golpe de estado”. Pero fue José Mujica, ex presidente y actual senador, la figura central de la actividad, a la que puso el cierre.

El ex presidente dijo que en Brasil se consumó “un golpe de Estado que ya estaba decidido” y calificó la discusión del Senado de Brasil como “una gigantesca pantomima para tapar el rabo”

Mujica dijo que “a esta mujer [Rousseff] la están condenando por no haber entrado en la corrupción”, pero que también hay un trasfondo que son “las derrotas electorales, las reformas sociales, redistribución del ingreso que había acontecido durante 13 años, el advenimiento de un momento de crisis por la situación mundial que constreñía a la economía brasilera y entonces había que conspirar por el reparto”.

Luego advirtió a los uruguayos que no hay que creer que por ganar una elección y tener mayoría parlamentaria se tiene “el mango absoluto del poder”. Finalmente, Mujica llamó a fortalecer la integración de América Latina y sobre todo la del “conocimiento” como único camino para alcanzar “un mundo mejor”.