Tras conocerse su vinculación con el antiguo gobierno de Ucrania, de posición prorrusa, renunció Paul Manafort, cabeza de la campaña electoral de Donald Trump.

Aunque rechazó las acusaciones, surgidas tras un trabajo de investigación de Associated Press y de la oficina de anticorrupción de Ucrania, Manafort decidió alejarse del cargo.

La relación de Trump con el gobierno de Rusia ha sido blanco de críticas durante la campaña electoral estadounidense.